Por Adrian Iepure
La boda es el costumbre familiar más interesante de todos y es muy complejo en sus formas tradicionales que combinan elementos rituales económicos, legales y folclóricos. El espectáculo” popular es casi fabuloso.
Los actos del casamiento son rituales y ceremoniales intentando traer la prosperidad, la fecundidad, la felicidad y la integración social de la familia joven. En este momento el traje popular gana algunas significaciones específicas y el acto de la ceremonia se compone de muchos costumbres: el bien – deseando en la puerta de la novia, el baile de la dote en el corral de la novia y el perdón de padres, después de la boda en la casa del novio, los obsequios y el adorno de la novia.
El repertorio musical es conforme: «el baile de la dote», «el gran baile», «tres veces alrededor de la mesa», «la canción de la pena de la novia», «el baile del anillo de la novia» y «el gran baile del anillo».
La boda es un espectáculo grandioso que obedece a un guión tradicional y pone en movimiento a decenas de personajes principales y secundarios, en una visión que convierte al mero espectador en convidado a la fiesta de la boda, siempre igual en su estructura y desarrollo, pero distinta en cada caso concreto. Los padres del novio y de la novia, casamenteros y casamenteras, familiares y amigos de los padres y novios, padrinos de boda, maestros cocineros y bodegueros, músicos «lautari», prácticamente todos los vecinos del pueblo toman parte de modo directo en la gran fiesta de la boda campesina. Momentos ceremoniales de suma belleza confieren a la tradición nupcial la grandeza que la destaca entre otras tradiciones propias a la vida familiar. Las amigas y los amigos de la novia y del novio empiezan con tiempo a preparar el pino de bodas o el estandarte, confeccionan el penacho y la camisa del yerno y la coronilla y el velo de la novia. En las aldeas de la tierra de Oas y en Maramures se trenzan y adornan los cabellos de la novia según un canon ancestral que requiere horas y días de trabajo paciente y minucioso, prestándole un aspecto muy pintoresco y original. Al arreglar a la novia, las muchachas le cantan coplas de despedida, haciéndole votos de felicidad para la nueva vida que se dispone a iniciar.
En la casa del yerno, éste, rodeado de sus amigos, afeita su última barba de soltero, se pone por última vez el sombrero de plumas y flores, que es propio del novio. Son momentos en que el sentimiento causado por la separación de los amigos solteros se mezcla con el júbilo de la integración a la comunidad de los hombres. El día de la boda, hacia la tarde, en las casas del novio y de la novia se reúnen los familiares y los convidados. Los jóvenes, junto a los músicos (lautari) acompañan a los padrinos rumbo a la casa del novio. Luego todos, montados a caballos adornados de fiesta y ostentando el estandarte de boda, tal como es el uso en las comarcas de Gorj, Sibiu y Suceava, o andando como en las aldeas de montañas del condado de Hunedoara, se encaminan para la casa de la novia para conducirla a la casa del novio. Todo el mundo se sienta en torno a la mesa de banquete. Los novios procuran romper en dos un gran roscón y comer conjuntamente del mismo plato y sirviéndose de una cuchara. Las mujeres preparan a la novia para acostarse. Al amanecer, los vecinos, acompañados a todo paso de los músicos (lautari) entonan a la ventana del nuevo matrimonio «la canción del albor». En el umbral aparece la joven esposa con sus cabellos prendidos en moño, sin adornos, llevando un pañuelo de cabeza, en señal de que ha ingresado dignamente en la comunidad de las mujeres honradas. La alegría y la fiesta se desencadenan otra vez, rindiendo homenaje a la joven mujer.
La ropa merece también una atención muy especial, aunque los trajes tradicionales se han cambiado por trajes contemporáneos. La novia llevaba una camisa blanca, la falda blanca con un delantal blanco sobre ella. Sobre la camisa ella llevaba un abrigo sin mangas de lana de oveja y un abrigo lanudo, grueso y de lana, atado en los hombros con un cinturón rojo. Las flores de pelo y ciertos objetos decorativos eran tejidos con cuidado en una manera sencilla, con ninguna tentación para el lujo.
La ropa del novio era aún más sencilla: camisa blanca de cáñamo, el abrigo sin mangas de lana de oveja, y los «pantalones grandes» (o en el invierno, pantalones blancos de lana ). El tenia también un cinturón ancho con seis hebillas que contienen el cuchillo, el tabaco, la pipa, el portamonedas y otras cosas pequeñas necesarias. Como un último elemento, en su caso él llevaba también botas con tintines. Sus únicos objetos decorativos eran los puños mano-cosidos, una bolsa sobre los hombros, y él signo de novio – las flores artificiales blancas en el pecho. Escenas emocionales para los padres son los momentos del «perdón» – cuando la novia y el novio piden el perdón a sus padres en la cuenta de los errores anteriores posibles. Cuándo el novio va para la novia, el padrino, el «hombre con la bandera» y un montón de huéspedes de boda lo acompañan. De todos los rituales encontrados en la ceremonia de la boda, lo mas interesante es el de limpiar las mejillas del novio y la novia por la suegra. Como esta es la primera vez que ella viene en la casa de su suegra, los gestos se pueden considerar como un ritual de la aceptación de la novia en la «casa» nueva (la «casa» que significa en la mentalidad de los campesinos la familia/padres). Después de la boda, la entrada de la mujer joven en la categoría nueva de mujeres casadas implica ciertas creencias y prácticas, como el cortar de un pedazo de madera por un golpe con un hacha (para nacer fácilmente) o el giro de la lana (ser un anfitrión de bueno posición).
El matrimonio ortodoxo
Para el Cristianismo Ortodoxo, el matrimonio es un Sacramento, uno de los siete Sacramentos comúnmente designados en la Iglesia. Esto significa que, desde el punto de vista de la comunidad cristiana ortodoxa, es relacionado directa e inmediatamente con la experiencia de pertenecer al pueblo de Dios y con la vivencia mística de formar parte de la Iglesia. Es fundamental para la comprensión de las prácticas e ideas cristianas ortodoxas acerca del matrimonio, enfatizar que el matrimonio como Sacramento comienza con la presuposición de que las dos personas que entran a la unión matrimonial son miembros del Cuerpo de Cristo y comparten su vida litúrgica. Condiciones de matrimonio ortodoxo
En la iglesia ortodoxa, el matrimonio es imposible con un no bautizado.
Un divorciado después de un matrimonio cristiano puede volver a casarse religiosamente. Sin embargo, ciertos rituales, pídele a esa persona para llevar a cabo un proceso de arrepentimiento, por ejemplo, en Rumanía, se le preguntó a orar en siete iglesias diferentes.
Conducta de la ceremonia.
Los esponsales se celebra simbólicamente en la entrada de la iglesia, el sacerdote recibe el intercambio del consentimiento de los novios, luego se coloca un anillo de oro y plata novio a la novia. Suena un amigo de cambio.
Entrando en la iglesia, la novia y el novio cada bodega de una vela grande, como testigos. Ellos reciben una corona, un signo de la Santa Cena, a continuación, coloque la lectura de textos sagrados
Sabemos que no todas las bodas son iguales pero si además estas son de diferentes religiones aun más.
Dependiendo de la religión a la que pertenezca la pareja, tendrán unas costumbres u otras, aunque también según qué religión sea se parecerá más o menos a la ceremonia religiosa. Este es el caso de las bodas ortodoxas y es que estas tienen algunas costumbres similares a las religiosas.
El ritual de la boda está lleno de detalles y costumbres que se siguen al pie de la letra, muchas veces sin saber a qué responden ni cuál es su origen…
En la ceremonia ortodoxa, el sacerdote realiza un rezo y seguidamente se viste con unas telas especiales las cuales simbolizan su oficio de sacerdote. Después, el sacerdote va a la mesa de la PROSCOMIDIA que está al lado izquierdo de la mesa del Altar en el Santuario. Allí él prepara el ofrecimiento del pan y vino para la Liturgia. Como podemos comprobar, la ceremonia, guarda muchas similitudes con el rito católico, con algunas pequeñas diferencias
La coronación
Como lazo, utilizan dos coronas atadas con un listón para unir las dos almas y demostrar que la pareja está preparada para establecer su propio reino como cabezas de una nueva familia.
El sacerdote toma las coronas y bendice a la novia y a al novio en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, colocándose detrás de los novios, intercambia las coronas 3 veces, como testigo del sello de esta unión.
La copa de vino de la cual toman los novios, simboliza que a partir de ese momento compartirán todo en la vida: alegría así como tristeza y que se apoyaran mutuamente.
Durante la ceremonia, estas coronas se colocan en el altar sobre una charola de plata, rodeadas de kufeta (almendras dulces) y arroz.
Los anillos
Durante esta primera parte se realiza el intercambio de anillos, luego de la bendición del sacerdote, este toma los anillos en su mano derecha haciendo la señal de la cruz sobre la cabeza de los novios, comprometiéndose ante Dios.
Los anillos son entonces colocados en la mano derecha de los novios, porque es la mano derecha de Dios la que bendice.
El padrino intercambia los anillos 3 veces. Este intercambio significa que en la vida de casados la debilidad de uno será compensada por la fuerza del otro y la imperfección de uno con la perfección del otro.
Las manos de los novios son unidas por el sacerdote y así se mantendrán hasta el final del servicio, simbolizando la unión eterna de la pareja y la bendición de Cristo que los corona como Rey y Reina de su hogar.
Fuentes
www.kalura.ro
www.google.ro
www.wikipedia.com
www.culturalromtour.com
www.publiboda.com
www.nuvisystem.com
