Por Manuel Medrano
El pasado día 15 inauguró exposición el veterano pintor Mariano Viejo en la sede de K-Pintas Asociación de Artistas Plásticos (c/ Doctor Palomar, nº 19, de Zaragoza).
En esta ocasión nos ofrece un conjunto de obras cuyo común denominador es que, sobre fondos de color castaño, se desenvuelven trazos angulosos en negro profundo, expresión que para Mariano significa la irrupción de lo oriental en estos lienzos dominados por el marrón.
Mariano Viejo, uno de los grandes pintores aragoneses contemporáneos, vuelve así a recuperar tendencias abandonadas hace años. El artista, que da nombre a uno de los concursos pictóricos más reputados de Aragón (y de España), el premio de pintura rápida del Casco Histórico, es un pintor artesanal que prepara personalmente sus pigmentos, acrílicos y telas. Crea con pasión y sin que reconozca maestros o influencias, pinta lo que el alma le pide.
El acto inaugural estuvo muy concurrido y animado, a lo que contribuyó la presencia de numerosos artistas que comentaron las últimas novedades culturales que se están produciendo en la ciudad, muy abundantes y de notable calidad. La inmensa mayoría de estos eventos están surgiendo por el empuje del importante tejido artístico, asociativo y empresarial que tenemos, y no siempre apreciamos, en la capital del Ebro y en Aragón.
