Reportaje fotográfico de Saint-Étienne-de-Baïgorry


Fotografías: Luis Antonio Mena Burillo

     Nuestro amigo y colaborador, nos trae para este número un brillante reportaje fotográfico de este singular y bello pueblo francés situado en la llamada Baja Navarra (Francia). ¡Que lo disfruten!

     “Los de Baigorri se llaman Baigorriar. Baigorri se puede traducir como el Valle Rojo. Esta zona del País Vasco se encuentra en la llamada Baja Navarra (Francia) y su municipio más importante, en el que nosotros estuvimos con el coche el verano pasado es Saint-Étienne-de-Baïgorry.

   Un precioso pueblecito, recomendable cien por cien si vas a Francia por Navarra que está regado por el río Nive de Aldudes afluente del río Nive o Errobi. Para llegar hasta aquí tienes que pasar una carretera de montaña pero que al menos en verano no supone mucha complicación y el paso de los Pirineos es una belleza de paisajes. Limita con municipios como Bidamay, St. Martin D’Arrossa, Irouléguy, Auhaux, o el valle de Baztán.

      El Baigorri dice nuestra fuente, que constituye el origen de los legendarios Reyes de Navarra. Aun habiéndose encontrado vestigios romanos, los primeros documentos existentes sobre este pueblo datan del siglo XI. En el año 1253, el Rey de Navarra Teobaldo II. Se lo concedió al patronato de Orreaga o Roncesvalles. El siglo XVI fue un tanto tumultuoso, dado que Castilla tomó Navarra y hubo disputas entre los valles de Erro y Baigorry.

   En la Revolución Francesa la villa adquirió el nombre de Thermopyles. Aquí se comenzó a celebrar por primera vez la fiesta del «Nafarroaren Eguna» como símbolo de unión entre los dos territorios navarros, que hoy es una tradición muy arraigada en la región. Realmente cuando llegas allí solo ves una carretera, una única calle-carretera, donde se encuentra toda la población. En realidad nos adentramos en el Valle de Aldude. 

    El sinuoso centro de Baigorri lo forman las casas que se extienden por su única calle, que a lo largo de kilometro y medio une los dos núcleos más importantes, la Plaza Consistorial y la iglesia. Primero encontraremos la plaza y el frontón, uno de los más antiguos de todo el País Vasco, al lado se encuentra el elegante caserío de Iriberria y en frente el Ayuntamiento, con los inevitables restaurantes y hospederías. Nosotros nos alojamos en el Hotel Juantorrena con un buen nivel de precio/calidad. Todo ello conforma un conjunto muy agradable. 

   Siguiendo la calle por entre caseríos, llegaremos al puente moderno, delante del cual se halla el antiguo o «romano», que como suele, suceder en Euskadi no tiene mas de cinco siglos. El conjunto que forman el arco del puente, el río, el Palacio de Etxauz a un lado y los montes rojizos de fondo es de foto. Otra de las cosas a ver es el Palacio de Etxaluz y la Iglesia. El Palacio de Etxauz fue construido en el s. XI, fue propiedad del vizconde del mismo nombre: Bertrand de Etxauz llegó a ser Obispo de Bayona, distinguido por su ardua defensa del catolicismo en tiempos de las guerras contra Jeanne de Albret y los calvinistas.

    En esos mismos tiempos y a causa de las guerras de religión, el palacio conoció su destrucción, pero fue reconstruido y a causa de su boda llegó a manos de Jean Isidore Harizpe, nombrado mariscal en tiempos de Napoleón III. Decir, como curiosidad, que una de las mayores celebridades que han llegado a hospedarse aquí ha sido el propio Charles Chaplin.

    Además de su historia, hay que decir que nos encontramos ante una joya arquitectónica, como dejan claro su exterior cuadrado y blanco con torres circulares del Medioevo (aspecto nada habitual en un palacio), su sala de armas interior, la formidable escalera medieval y las demás estancias. Tiene el Premio de Antiguos Palacios de Francia. Está abierto al público y se puede visitar de marzo a noviembre, excepto los lunes, entre las diez y las doce y entre las dos y las cinco y media, la entrada vale 5´25 €.

    Llegando al tercer puente de Saint Etienne, encontramos la Iglesia, con sus cuatro columnas y capiteles románicos y un ábside gótico. El interior tiene la forma de un túnel de nave única, donde podemos destacar el retablo barroco de estilo hispánico del s. XVIII y el techo policromado de madera, además de las típicas en Lapurdi pero más raras en la Baja Navarra son las galerías para hombres, ver abajo las fotos. Por último, podemos volver hasta la plaza por la calle principal y así dar cuenta de algunos caseríos que antes no hemos podido apreciar. Al parecer, nosotros no estuvimos, el Día de Navarra, el famoso Nafarroaren Eguna a finales de Abril congrega en la pequeña población una gran fiesta con animación, colorido, música y mucho baile. También hay fiestas la primera semana de Agosto. Y nada más:  Eskerrik asko bidaiariek.”

Fuente: http://www.el-lobo-bobo.com

Artículos relacionados :