Por María Gómez y Patiño
Una de las funciones de la religión católica siempre ha sido la persuasión en sus distintas vertientes: unas veces para prohibir (Diez Mandamientos), y otras…
…para recomendar (Normativa moral), pero no es tan frecuente que la religión pudiera convertirse en una exención de vacunación por coronavirus (covid-19).
Según informa el Washington Post, la noticia daba cuenta de esta exención para una oficial de las Fuerzas Aéreas americanas, un cuerpo militar especializado y elitista que, aunque había realizado cientos de exenciones por razones médicas, ninguna había sido por razones religiosas. Esta oficial será el primer caso dentro de las Fuerzas Aéreas en ser eximida de la vacuna coronavirus, mientras no se regularice definitivamente la situación, lo que implica la no penalización.
La Armada norteamericana (los marines) a pesar de su imagen disciplinaria tan estricta, tuvo que aceptar la sentencia de un juzgado federal que atendió las demandas de 35 marines, respetando sus alegaciones religiosas en contra de la vacuna. Conviene recordar que, en todos los cuerpos del ejército norteamericano, la no vacunación puede acarrear como consecuencia la expulsión, pues la visión tanto del sistema político como de la opinión pública norteamericana entienden que se ha de garantizar un ejército sano, capaz de defender la seguridad del país, en cualquier momento y situación.
Lo noticioso de esta sentencia consiste en que la oficial que solicitaba la exención por motivos religiosos ha sido eximida, al menos hasta que haya una reglamentación definitiva sobre el tema. En sus alegaciones ella fundamentaba su negación a la vacuna por el hecho de que esta podría favorecer o provocar un aborto, motivo de peso en la religión católica como para aceptar tal argumentación, dado que sus abogados habían presentado un informe del sistema de salud pública norteamericano donde se afirmaba que las líneas celulares utilizadas en la producción de vacunas son reproducciones de células fetales de abortos realizados en las décadas de 1970 y 1980, aunque las vacunas no contengan células fetales en sí mismas.
Llama la atención el hecho de que tanto el Pentágono como las Fuerzas Aéreas hubieran rechazado hasta ahora la solicitud de exenciones de las vacunas por motivos religiosos por considerar que tener un ejército sano y disponible es prioritario para la seguridad nacional
No es menos destacable el hecho de que las Fuerzas Aéreas norteamericanas hayan rechazado cerca de 3.000 solicitudes de exenciones por razones religiosas hasta hoy, según informa la agencia de información Associated Press, de las cuales, solo ha prosperado la de esta oficial.
Una vez más, han entrado en conflicto las razones socio-políticas con las religiosas, o si se prefiere, la seguridad de la nación contra el derecho individual al respeto de las creencias religiosas. En esta ocasión, se trata de una mujer oficial de las Fuerzas Áreas norteamericanas la que ha puesto en jaque a los jueces federales prevaleciendo la religión sobre la política.
Publicado en: https://www.elperiodicodearagon.com/
