Por Gloria Cohen
En la Argentina actual, cada comienzo de mes nos sorprende con aumentos en los precios de transportes, combustibles, servicios, alquileres, entre otros rubros de la economía; en cambio, los aumentos en alimentos, indumentaria, medicamentos, son continuos y permanentes.
Gloria Cohen
Corresponsal del P.U. en Argentina
cumple el viejo y conocido dicho que: “los salarios suben por la escalera y los precios por el ascensor”, pero ahora el ascensor es del Siglo XXI, es decir es ultra rápido.
Como ya se relató, en el mes de diciembre el Presidente Milei firmó un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) de desregulación económica con 366 artículos que cambia numerosas normativas existentes. Para validarlo envió al Congreso un proyecto de ley denominado Ley de “Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos” con 183 páginas y 664 artículos con sus correspondientes incisos, que dado su extenso nombre comenzó a denominarse como “Ley Ómnibus”, que obligó a la Cámara de Diputados a abandonar el tradicional receso de enero.
En un par de meses, la denominada “Ley Ómnibus” desbarrancó y fue retirada del Congreso por el propio Presidente, porque los legisladores no se ponían de acuerdo en la redacción de tan numerosa cantidad de artículos y de incisos, de tan variada índole incluidos para su tratamiento. Ante el revés el Presidente Milei declaró que “el Congreso era un nido de ratas”.
Como dato de color y haciendo alusión a las ratas: el 29 de febrero, el Jefe de Gobierno (Alcalde) de la Ciudad de Buenos Aires fue sorprendido por una ellas frente a las cámaras, mientras estaba dando una conferencia de prensa en la Villa 31, intentó pisarla y luego fue atrapada por dos perros, en una escena bizarra que quizás podría haber sido tomada del cuento “El Matadero” escrito por Esteban Echeverría entre 1838 y 1840.
Volviendo al Presidente Milei, es conocido mundialmente por sus viajes espirituales: como a Israel, donde lloró en el Muro de los Lamentos, y a El Vaticano donde fue recibido y se reconcilió con nuestro compatriota el Papa Francisco, de quien durante la campaña había dicho que “es la representación del maligno en la tierra” y lo señaló como “la persona más importante de toda la Argentina”; como un excelente católico, el Papa Francisco olvidó las ofensas antes proferidas por nuestro Presidente y lo perdonó.
A pesar de estos viajes espirituales, permanentemente el presidente Milei confronta con nuevos enemigos y aparecen nuevos frentes de batalla, sea con legisladores, gobernadores, sindicalistas, así como con comunistas y colectivistas.
En medio de tantos conflictos, entró en escena la enviada del Fondo Monetario Internacional: la número dos (2) del organismo, figura de gran relevancia, quien visitó nuestro país y “evaluó los progresos y las dificultades que enfrentan los argentinos y reconoció que Argentina necesita reformas de mercado para revertir la caída que se viene dando en la calidad de vida, pero que éstas deben ser diseñadas y secuenciadas para asegurar un crecimiento sostenido e inclusivo”.
Es que la mayor parte de la reducción del déficit de las cuentas del sector público recae sobre la licuación de las jubilaciones (retiros) que no recuperaron su valor frente a la altísima inflación, la eliminación de la obra pública y la retracción económica, entre los principales factores. El Índice de Pobreza ronda el 50 % o más, y hay pobres entre trabajadores y jubilados.
En medio de tantos frentes de batalla abiertos, el Presidente Javier Milei abrió las sesiones ordinarias en el Congreso Nacional el día 1º de marzo, como es lo habitual, pero en vez de hacer la ceremonia y el discurso por la mañana, lo hizo a las 21 horas, por lo que el día transcurrió de manera tensa por la expectativa de posibles desaires y agresiones entre el Presidente y Legisladores o disturbios causados por manifestantes.
Finalmente todo transcurrió sin incidentes y Milei en su discurso enumeró una serie de medidas contra “la casta política” prometidas durante la campaña y convocó a gobernadores a un Pacto para el 25 de Mayo en la Provincia de Córdoba, sujeto al envío y aprobación por parte de ambas Cámaras Legislativas de un nueva versión del Proyecto de Ley Bases.
Esta iniciativa del Presidente es una forma de “barajar y dar de nuevo”, como en un juego de naipes y también de redoblar su apuesta en su ardua tarea de convertirse en el fundador de una nueva Argentina.
Como el camino es tortuoso y con sobresaltos, es importante citar la manifestación multitudinaria del 23 de abril, convocada en defensa de la “educación pública”; porque si algo hizo grande a este país sudamericano fue la calidad de su enseñanza pública y gratuita, no sólo en los niveles primario y secundario, sino también en sus prestigiosas Universidades, en las que se formaron los cinco (5) argentinos que obtuvieron el Premio Nobel, así como numerosos habitantes de este suelo que pudieron progresar gracias al acceso gratuito a las Universidades Nacionales.
Aunque el deterioro de la educación pública viene desde hace años y derivó en la proliferación de una importante oferta educativa privada, ahora las Universidades Nacionales declararon públicamente que están desfinanciadas. Las multitudes marcharon sin incidentes, no sólo en la Ciudad de Buenos Aires, sino en muchas otras ciudades del país con la presencia de estudiantes, profesores, docentes, egresados y todos quienes adhirieron a la defensa de esta causa.
A pesar de tantos conflictos el Presidente Milei obtuvo su primer éxito legislativo el 30 de abril, cuando su proyecto de ley Bases obtuvo la media sanción en la Cámara de Diputados -que ahora pasará al Senado-, sin duda superó un hito en el camino. Milei elogió “la labor patriótica” de muchos diputados de la oposición a quienes antes había tildado de “ratas”.
Como dato de color, es oficial que finalizó la relación de Milei con su ex novia Fátima Florez, es decir que duró un poco más que un verano.
Si al verano nos remitimos, una mención especial merece el tema de la enfermedad denominada “dengue”, que se transmite por el mosquito “Aedes aegypti”, que ya se convirtió en endémica.
Pocos le prestábamos atención mientras estaba sólo en las zonas cálidas y húmedas del Norte del país, como en las Provincias de Chaco, Corrientes, Formosa, Misiones y Tucumán, entre otras. Pero con el verano, los mosquitos “Aedes aegypti” y el dengue llegaron al Área Metropolitana de Buenos Aires –AMBA-; enfermedad propia del Caribe y países tropicales, con el calentamiento global y la falta de control de los mosquitos, la enfermedad se extendió a estas latitudes.
En la última temporada estival 2023/2024, se reportaron 280 muertes y más de 396.000 casos, con un pico en el AMBA a mediados del mes de marzo (fines del verano).
Se prevé que con la llegada del frío del otoño e invierno, se interrumpirá el ciclo de los mosquitos y será el momento óptimo para que la población pueda vacunarse, pero la vacuna es muy cara, deben afrontar este gasto quienes quieran vacunarse y debe aplicarse en dos dosis para lograr mayor efectividad.
Sin duda, el dengue complica al ya frágil sistema sanitario argentino y se suma a la larga lista de preocupaciones que tenemos. Parece que la vida es una ruleta, pues un mosquito puede picar a cualquiera y ocasionar un deterioro muy grave en la salud, incluso la muerte.
Seguimos transitando nuestro túnel, así como tantos otros países y sociedades lo hacen en un Siglo XXI difícil y complicado para este mundo en el que giramos a diario.
