Por Jorge Moreno
Aragón se encuentra entre las Comunidades que más porcentaje de coste salarial subvenciona. Un total de 151 personas han sido contratadas a través del empleo ordinario.
El Gobierno de Aragón, a través del Instituto Aragonés de Empleo, viene incentivando cada año el acceso al empleo de las personas con discapacidad, tanto a través del empleo ordinario como a través del empleo protegido. El empleo protegido es una de las prioridades y es el que aglutina la mayor parte de las ayudas que el Instituto Aragonés de Empleo dedica a la integración de las personas con discapacidad, si bien el apoyo del INAEM al empleo ordinario ha supuesto, en 2013, un total 440.234 euros en ayudas a este tipo empleo, para el que se han contratado 151 personas con discapacidad, de las que 54 son de carácter temporal y 97 con contrato indefinido.
Este marco laboral protegido se da en el ámbito de los Centros Especiales de Empleo, que en Aragón dan trabajo a 1.635 trabajadores con discapacidad en este momento. Son empresas que tienen esa condición de “especiales” porque, al menos, el 70% de sus plantillas están constituidas por personas con discapacidad. Discapacidades que, en algunos casos, por su gravedad o las especiales dificultades de quienes las padecen, requieren de apoyos especiales prestados por personal especializado. Y por ello, este personal integrado en Unidades de Apoyo es subvencionado desde el Instituto Aragonés de Empleo. En 2013 se han destinado a la financiación de estas Unidades de apoyo un total de 1.080.000 euros, que contribuyen al coste salarial de personal técnico y de apoyo a la producción que integra estas unidades especializadas. Un total de 113 personas integran en su conjunto las diferentes Unidades de apoyo subvencionadas.
Por otro lado, el INAEM colabora en la puesta en marcha de proyectos de creación de nuevos centros especiales de empleo o de ampliación de las plantillas de los existentes, para ello subvenciona parte del coste de las inversiones necesarias y vinculadas a la creación de nuevos puestos de trabajo en centros especiales de empleo. Así, en 2013, el INAEM ha adjudicado 450.000 euros para proyectos generadores de empleo y en 16 de los 68 centros especiales de empleo existentes en este momento.
Pero sin duda, el mayor apoyo desde el Instituto Aragonés de Empleo, por el volumen presupuestario dedicado a ello, se encuentra en las subvenciones mensuales al coste salarial de los trabajadores con discapacidad en los centros especiales de empleo. El Gobierno de Aragón, a través del INAEM, aporta una subvención mensual del 50% del salario mínimo interprofesional (SMI) al salario que perciben los 1.635 trabajadores. Este año se destinarán a este fin un total de 7.250.000 euros.
La difícil situación por la que atraviesan muchos centros especiales de empleo ante la actual crisis económica y las especiales dificultades de integración laboral de muchos de sus trabajadores que sufren discapacidades físicas o sensoriales en un grado superior al 65% o parálisis cerebral, enfermedad mental o discapacidades psíquicas de al menos un 33%, ha llevado al Gobierno de Aragón, con el consenso de las entidades representativas del sector de la discapacidad, a buscar ayudas extraordinarias que viniesen a reforzar las ayudas básicas al coste salarial que normalmente ascienden al 50% del SMI citado. Así, este año, a través de líneas de financiación extraordinarias se han convocado ayudas complementarias que han ascendido a 1.400.000 euros adicionales y que han permitido incrementar la ayuda salarial para las personas con discapacidades más severas hasta el 67% del salario mínimo interprofesional. De este modo, Aragón se encuentra entre las Comunidades que más porcentaje de coste salarial subvenciona. Estas ayudas, ya otorgadas, han complementado la subvención básica al coste salarial de 840 trabajadores de los 1.635 totales que integran las plantillas de los centros especiales de empleo de Aragón.
La suma de todo lo expresado anteriormente permite concluir que, desde el Gobierno de Aragón, más de 10.000.000 de euros se han destinado a la integración laboral de las personas con discapacidad.