Por Al Caponi
El alcalde de Zarabola, luego de los múltiples rifirrafes que han seguido en el Ayuntamiento tras llamarle “carapolla” por lo bajini el concejal Cuberowsky al alcalde de Madrí, ha decidido entrar en batalla y …
…para congraciarse con su colega y darle satisfacción ha decidido sacar a concurso la elaboración de un cabezudo donde aparecerá el concejal comunista con enorme cabeza de glande y su cara superpuesta y será donado al barrio de Torrero para que sus habitantes lo paseen cuando la pandemia lo permita. Al tiempo, la Consejera de Cultura ha lanzado las bases para que mediante un concurso que, casi seguro, estará amañado, los zaragozanos puedan enviar cuantas coplillas deseen para cantarle al concejal cuando su cabezudo sea bailado junto a los gigantes y los demás de la comparsa.
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- Photovisión del estado de la situación
Este concurso estará dotado con 200.000 € y no podrán participar en él todos aquellos que ya hayan sido premiados en los concursos de letras de jota, sean Premio Aragón de la Letras, o sean licenciados en Filología. Se trata, en suma, de que el concurso tenga un carácter popular, dadas las características políticas del representado.
Por otra parte, el alcalde se ha mostrado decidido a que los plenos sean ejemplares en cuanto al uso del lenguaje y no se tolerará insulto alguno entre los miembros del pleno aunque si estará el público asistente autorizado a ultrajar con todo tipo de insultos e, incluso, a meterse con las madres y padres de todos ellos para que sientan en sus propias carnes los improperios del pueblo soberano.
La iniciativa ha sido muy bien aceptada por todos los grupos municipales y la Consejera de cultura ha sido la encargada de crear unos cuadernillos con todos aquellos insultos que cada grupo recoja entre sus bases. “No puede ser que nosotros podamos insultarnos cómo y cuando queramos y el pueblo soberano tenga que ser una mero espectador”- dijo el alcalde. “La democracia es para todos – continuó- y a partir de ahora en cada pleno y por sorteo en cada barrio, podrán venir un total 100 personas a los plenos y podrán insultarnos en las pausas que haremos a tal fin guardando como es de rigor, todas aquellas disposiciones sanitarias para tiempos de pandemia y no se podrá escupir a la cara aunque si a las chaquetas y pantalones o vestidos de los concejales, concejalas o concejalos. La única condición es que estén al corriente en el pago de los impuestos municipales”
