Por Jorge Moreno
El objetivo del consejero de Sanidad y Bienestar Social del Gobierno de Aragón, Ricardo Oliván, es impulsar antes de final de año las ayudas previstas en la ley de dependencia, incorporando mil nuevos beneficiarios que recibirían prestaciones vinculadas a los servicios de atención por medio de la concertación de plazas de residencias o por medio de cuidadores profesionales.
En la actualidad hay unos seis mil aragoneses pendientes de recibir las aportaciones a pesar de tenerla reconocida. Hasta ahora la mayoría de ayudas que se concedían eran económicas a cuidadores familiares (un sesenta por ciento del total), por lo que la finalidad de las nuevas medidas es aumentar las prestaciones vinculadas al servicio. Todo lo que sea mejorar la atención a la dependencia es un acierto.
Además la consejería tiene como uno de los planes potenciar la tele-asistencia y la ayuda a domicilio, aunque ya existen acuerdos en estas materias con el ayuntamiento de Zaragoza, se quiere implementar estos servicios.