Por Luis Zamora
Durante el mes de Marzo de 2010 continuaron las labores de reforestacón que se llevan a cabo en Hinojosa del Campo (Soria) bajo los auspicios del Instituto Superior de Silvicultura Improductiva del Pollo Urbano (ISSIPU).
Plantación
En otra finca denominada «Arenal de la vega», se ha plantado un pequeño pinar piñonero entremezclado con abundante bellota de cascarra autóctona y se ha preparado una zona para ver el desarrollo que presentan varios chaparros y alcornoques plantados en bellota. Por otra parte también se aprovecho la ocasión para preparar varias bandejas de alveolos con bellota autóctona (para reponer futuras marras) y otra de ellas con semilla de algarrobo. En Primavera, veremos los primeros resultados.
Mejoras en el tractor
Mientras se realizan las plantaciones, y cuando las inclemencias del tiempo impiden estas labores, en el garaje se va adecuando el BJR. Ya se le ha instalado, detrás del asiento, un recipiente porta-objetos de plástico, y se le han colocado nuevas bisagras de cierre del capó. También se le ha colocado una pequeña estación metereológica (temperatura, humedad, reloj e higrómetro) y el gps «Garmín» que portaba el anterior tractor.
Una cuestión muy importante, ha sido soldar los topes del hidráulico de la dirección que estaban partidos y ha exigido unas soldaduras de precisión. También se le ha instalado un asiento nuevo, una herradura de la suerte, procedente de una yegua malagueña, y se va procediendo, poco a poco, al pintado de las diferentes soportes, que presentaban un estado de abandono deplorable. También han quedado casi a punto las instalaciones electricas del vehículo.
Otro aspecto digno de mención ha sido el cambio de la salida del tubo de escape, pues habitualmente los tractores fruteros presentan una pequeña salida terminal para no dañar los árboles, con lo que el conductor se traga (según sea la dirección del viento) todos los gases del escape. Así pues el ingeniero José Mari procedió a soldar un tubo acodado de acero cromado y de este modo eliminar ese problema. También se le recicló de un viejo John Deere el tapón antilluvia.
Y finalmente, se procedió a dotar al tractor de unas tijeras hidráulicas de poda diseñadas en los talleres de Hinojosa, se colocó una chapa de 120 kilos en el cultivador para mejorar la estabilidad en la profundidad de ataque del mismo y se está trabajando en el diseño de una «rastra» que elimine las yerbas pequeña tras el paso del cultivador. De momento, pues, el vehículo y sus aperos están en condiciones óptimas de trabajo.
