Por Mirinda Blasques
Agentes de Protección de la Naturaleza de Aragón han recogido en los montes esteparios de Muel (Zaragoza) un ejemplar herido de águila imperial ibérica.
El aviso lo dio un agricultor el pasado fin de semana, al encontrar al animal debajo de un tendido eléctrico, no muy lejos de la autovía, mientras estaba labrando en un campo.
El águila imperial fue inmediatamente trasladada al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre del Gobierno de Aragón, en La Alfranca en Pastriz (Zaragoza), donde actualmente permanece vivo y en proceso de cura y rehabilitación.
Las radiografías efectuadas por el equipo veterinario desvelan que un fuerte impacto le ha producido la rotura de una tibia –pata-, y una delicada luxación del codo que le podría impedir volar de por vida. Primeramente se sospechó que la causa de su estado era la colisión con un tendido eléctrico, pero dadas las características del golpe no se descarta que hubiese sido por atropello en la carretera.
Se trata de un ejemplar de menos de dos años de edad, con plumaje inmaduro y color marrón canela. Su presencia en este territorio era bien conocida por ornitólogos, naturalistas y Agentes de Protección de la Naturaleza de Aragón, entre los que la presencia de un ejemplar de águila imperial había despertado una gran expectación. Desde hace más de cuatro meses la llevaban observando en la zona zaragozana comprendida entre los términos municipales de Muel, La Muela y Épila, donde estas aves rapaces disponen de abundantes conejos silvestres, que son la base principal de su dieta alimenticia. Por ello, estas grandes aves de presa están consideradas unas verdaderas aliadas del agricultor, ya que contribuyen al control de las grandes poblaciones de conejo que tantos daños están ocasionando últimamente en campos y cultivos.
Supervivencia, reproducción, observación y punto fotográfico
El ave más emblemática de la fauna española, el águila imperial ibérica (Aquila adalberti) es un ave muy rara de ver en Aragón, pues no se trata de una especie reproductora, ni tan siquiera migratoria o en paso.
Sin embargo, en los últimos tres años, y debido al incremento de las poblaciones del centro peninsular, donde se llevan a cabo importantes esfuerzos para la recuperación de esta especie en peligro de extinción, cada vez se están observando más ejemplares divagantes de águila imperial, sobre todo de ejemplares jóvenes que se desplazan desde sus áreas habituales de cría en busca de nuevos territorios de caza.
En Aragón, de forma reciente, hay unas cuántas referencias y observaciones crecientes, todas ellas esporádicas: en Tarazona, La Almunia de Doña Godina, Malanquila (Zaragoza), Sallent de Gállego, Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido (Huesca), Moscardón (Teruel)y esta última de la zona de Muel-La Muela-Épila.
El águila imperial es una de las aves más escasas y amenazadas del mundo. Su área de distribución se limita al Mediterráneo occidental, encontrándose prácticamente toda su población reproductora en el suroeste y centro de España. La presencia del águila imperial en España se produce en las comunidades de Castilla y León, Castilla La Mancha, Madrid, Extremadura y Andalucía, donde cría en zonas de bosque y matorral mediterráneo.
Aviso de animales heridos
En caso de que un ciudadano encuentre un animal muerto o herido, hay que llamar al teléfono de emergencias 112 o a las emisoras provinciales de incendios del Gobierno de Aragón, o bien hay que ponerse en contacto con los Agentes de Protección de la Naturaleza del Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, quienes recogerán al animal para su traslado al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de La Alfranca, hospital donde ingresan los animales salvajes de todo Aragón para su posterior cura y rehabilitación.