Fotografías: Manuel Lorenzo
Texto: Martín Ballonga
Como una mirada para explorar la belleza de las cosas. Como un silencio que desvela los ruidos armoniosos de la vida. Como los graznidos de los cuervos que se mezclan ominosamente con el batir amenazador de sus alas.
Como un beso que, por temor, se queda en la comisura de los labios. Ella es Paula, la niña. Su tío, Manuel Lorenzo, es el autor de estas inquietantes estampas al más puro estilo del movimiento sinuoso. ¿Recuerdan aquellos ojos en chiribitas de Marujita Díaz? ¿O aquellos de Lina Morgan? Pero los tiros no van por ahí. Los tiros tienen mucho que ver con los relatos de terror que el fotógrafo le cuenta a la niña de sus ojos. El de la momia. El del escarabajo gigante. El del hombre invisible. O menguante. O sin sombra. El de la mujer de los siete brazos. Aunque el que más le gusta a Paula es el de los pájaros. “Cuéntamelo otra vez, tío, cuéntamelo otra vez”. Y Manolo, paciente y pariente, la sumerge, de nuevo, en ese cínico suspense ornitológico e hitchcockiano, de raíz metafórica y carácter irresoluto, donde unas aves enloquecidas atacan, inexplicablemente, al hombre. Es una indagación en la fragilidad de lo cotidiano, con un inquietante desenlace sin ninguna explicación, nada tranquilizador. Son los cuervos (¿o son gaviotas?) en lo alto de unas columnas como ojos de chimeneas en plena ebullición y en rigurosa fila india. O como Simeón el estilita, ese eremita que oraba encaramado a una columna en medio del desierto, en esa su lucha contra la indiferencia y las tentaciones. Pero Paula nunca olvida estos cuentos que le cuenta el tío Manolo y que la hacen más fuerte. Un día, más pronto que tarde, irán los dos a un recinto deportivo especializado en el tiro al plato. Y en vez de tirar al plato y matar al cuervo, maldita sea, tirarán al cuervo y herirán al pichón. A partir de ese instante, la intrépida Paula de los ojitos como chiribitas querrá conocer el sorprendente mundo de Edgar Allan Poe. “Cuéntame a Poe, tío, cuéntame a Poe”. Y el tío Manolo empezará a contarle la historia del nigromante que se ha convertido en cuervo y acude a un sabio para que le devuelva la normalidad. Como un silencio que desvela los ruidos armoniosos de la vida.
La página del artista: www.manuelorenzo.com
(*)Las cinemagrafias (o cinemagraphs como son conocidos originalmente en inglés) son fotografías en las que ocurre una acción de movimiento menor y repetida.
Se producen tomando una serie de fotografías o grabaciones de vídeo y utilizando un software de edición de imágenes, componiendo las fotografías o fotogramas de vídeo en un archivo GIF animado de tal manera que el movimiento en parte del sujeto expuesto (por ejemplo, pierna colgando de una persona) se percibe como un movimiento repetitivo o continuo.
El término «cinemagraph» fue acuñado por los fotógrafos de EE.UU. Kevin Burg y Jamie Beck, quienes utilizaron la técnica para dar vida a sus fotografías de moda y noticias empezando en principios de 2011
