México: Centro Histórico de Tlaxcala


Por Emilio Mendoza

    Visita relámpago a la ciudad de Tlaxcala, capital del Estado más pequeño de la República Mexicana. Tlaxcala es una ciudad pequeña, tranquila, limpia y sin mucho tráfico.

   La gente es muy amable y servicial. Me asombró la belleza de edificios antiguos que conservan todavía su estilo colonial. Los invito a conocer algo más de esta agraciada ciudad.

    Llegamos en la mañana temprano. Tlaxcala no está muy lejos de la ciudad de México. En un poco más de dos horas de carretera, ya estábamos disfrutando los encantos arquitectónicos de esta linda ciudad. Desde temprano recorrimos las calles del centro histórico. Después de saborear algo de la exquisita gastronomía tlaxcalteca, paseamos toda la tarde por las hermosas plazas y calles coloridas del centro histórico.

Plaza de la Constitución

      En el siglo XVI, Tlaxcala junto con la capital mexicana fueron las primeras ciudades en edificarse utilizando los criterios teórico-arquitectónicos que sugerían un trazado cuadricular teniendo como eje urbanístico la plaza central. De hecho, en el centro histórico de Tlaxcala se puede admirar este diseño que representa una cuadrícula. La plaza principal o jardín central, con el nombre oficial de plaza de la Constitución, fue trazado en el año 1525. En medio de vetustos árboles destacan la fuente de la Santa Cruz, que fuera un regalo del Rey de España Felipe IV a la ciudad de Tlaxcala, y un kiosco del siglo XIX.

Palacio de Gobierno

    Al poniente de la plaza de la Constitución apreciamos el  edificio que alberga al gobierno del Estado. La construcción data del siglo XVI y está en excelente estado de conservación. Inicialmente, durante la colonia, estaba dividido en tres segmentos que incluían la casa Real, la sede consistorial y la alhóndiga. En su interior, las paredes están decoradas con el mural “La historia de Tlaxcala y su contribución a lo mexicano” del artista Desiderio Hernández Xochitiotzin, uno de los últimos muralistas de México.

Portales

     En el costado norte de la plaza se aprecian los portales conocidos en sus orígenes como Portal Real. Este edificio con una sublime serie de arcadas fue construido en el siglo XVI. En aquella época, los portales eran el espacio inmediato a la puerta de entrada del Mercado del Portal del Parián que consistía en varias tiendas que vendían productos provenientes de España y de las Islas Filipinas. Hoy en día, ese mismo espacio da acceso a oficinas públicas y varios restaurantes, en uno de los cuales, nosotros disfrutamos un delicioso desayuno al día siguiente de nuestra llegada.

Parroquia de San José

    Desgraciadamente no pudimos visitar el interno de la parroquia de San José debido a que el edificio estaba cerrado. Este monumento sufrió severos daños durante la sacudida del terremoto del año pasado. Se dice que en el siglo XIX otro terremoto había dañado también la estructura del edificio. Aquella vez, la cúpula y la bóveda se derrumbaron. Cuando éstas fueron reconstruidas, fue añadido un revestimiento de azulejo a su decoración. El monumento que data del siglo XVI, no nació como parroquia, sino como una ermita dedicada a la virgen María. El monumento presenta una fachada con motivos barrocos en cemento, recubiertos con ladrillos y azulejos de talavera. La imagen de San José está ubicada en la parte central de la fachada sobre el portón de ingreso. La iglesia tiene una torre sobre el costado izquierdo que también está decorada con azulejos y motivos neoclásicos. Esta iglesia resguarda  la famosa imagen del Santo Niño milagroso de Tlaxcala, la cual no pudimos conocer. Será en otra ocasión.

El Palacio Legislativo

   El Palacio Legislativo de Tlaxcala está ubicado en el Centro histórico en la cabecera de la plaza Juárez, convertida en un magnífico jardín con una enorme estatua de Juárez. Parte de este edificio perteneció al antiguo Mesón Real Indígena construido en el siglo XVI. En 1982 fue rescatado por el gobierno para convertirlo en las nuevas oficinas del palacio Legislativo salvando gran parte de la fachada original. En su interior, en el patio central del nuevo recinto Parlamentario sobresale un plafón en vitral de 120 m²  y un mural que contiene los escudos heráldicos de los municipios del Estado.

Catedral de Nuestra Señora de la Asunción

   La Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, construida en el siglo XVI, es la principal iglesia católica en la ciudad de Tlaxcala. Nació como el Templo de San Francisco de Asís y funcionó como convento Franciscano. El antiguo convento fue construido para albergar a los frailes que se encargarían de llevar a cabo la evangelización de los pobladores indígenas de la región. Posteriormente el templo fue ascendido a catedral con advocación a Nuestra Señora de la Asunción.

    En lo personal, esta es la parte más interesante de la ciudad para visitar. Además de poder apreciar la arquitectura y la buena conservación de la iglesia, el conjunto arquitectónico permite la realización de un bonito paseo. El atrio tiene una forma extraña; se trata de un cuadrilátero irregular que no tiene ningún lado paralelo a otro y está todo empedrado. Se ingresa a éste a través de tres grandes arcos que sostienen un paso de ronda que une el claustro con el campanario, una torre alta de base cuadrangular, coronada por una bóveda hemisférica. El paseo continúa con la visita de la Catedral, cuya fachada es demasiado austera, característica de las primeras construcciones franciscanas de la época. Al interno se encuentra la pila donde se bautizaron a los primeros indígenas de Tlaxcala en 1520 y el primer púlpito de la nueva España que muestra la leyenda: “Aquí tuvo principio el Santo Evangelio en este nuevo mundo”.

    Luego, se puede visitar el museo regional adyacente a la iglesia que en su interior resguarda una enorme cantidad de obras de arte. Para finalizar el paseo, se pasa frente a la capilla abierta.

Capilla abierta

    La capilla abierta del exconvento franciscano de Nuestra Señora de la Asunción de Tlaxcala era utilizada para que el sacerdote oficiara la misa para la nobleza tlaxcalteca que asistía a las ceremonias religiosas en el atrio, al aire libre. Tiene un estilo arquitectónico gótico, pero además se puede apreciar un estilo mudéjar producto de la influencia islámica en España.

Plaza de Toros

     Nuestro paseo por la ciudad de Tlaxcala terminó con la visita de la plaza de toros, otro tesoro arquitectónico de la ciudad. La parte más antigua de esta arena taurina fue construida a finales del siglo XVII y fue remodelada en la década de los 50`s del siglo pasado. Se trata de una pequeña plaza, pero la más importante de Tlaxcala. El campanario de la Catedral observada en la otra parte del ruedo embellece aún más ese escenario taurino.

La del estribo

    Gracias a su belleza y a su tranquilidad, la ciudad de Tlaxcala es aconsejable para quien sueña con pasear tomado de la mano con su pareja, vagabundeando románticamente por sus rincones históricos congelados en el tiempo…

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