Qué jetas ¡Las de los otros!…

 

Por José Luis Llera Gil

Hay tantos temas entre los que elegir que mi pluma se arruga cuando ha de ser portavoz de mi opinión. Lamentablemente hay algunos, muy destacados, de actualidad e importancia, que por haber dicho en algún momento que de ellos nada escribiría, quiero respetarlo y cumplirlo , al menos por el momento.

Quienes, como yo, nos ocupamos y movemos entre actividades altruistas, merecedoras ¿por qué no? de alguna distinción favorable en determinados momentos y ocasiones pero a las que renuncio antes que a nada, por de quienes parten, hemos de mal destacar el silencio administrativo, que es lo mismo que una falta de educación política, de quienes ostentan cargos, que llevan consigo, parece ser, no contestar a las cartas que reciben aunque sean de sus padres (no de la Constitución) sino de los que les dieron vida.

Es una vergüenza y así nos va, que todos los políticos de medio pelo, que son todos porque no hay otros donde elegir, no contesten ni a una sola carta de las que reciben, aun cuando sea con dos líneas a través de internet, si no llevan remite de sus correligionarios o amigotes, y aun cuando se les ofrezca el oro y el moro a la Ciudad o Región a la que representan,

¡ Si yo les contara amables lectores ¡. Bueno, pues miren por tanto, lo voy a contar.

En cierta ocasión después de insistir que deseaba informarle de un proyecto importante a una autoridad de un pueblo turístico del Pirineo, y además ostentando el cargo de Director General del Gobierno Autonómico, me recibió con desgana total, a una hora intempestiva e inusual. A los 15 minutos recibió una sospechosa llamada telefónica, respondiendo a no se quien que “enseguida termino” .Mentira podrida y premeditada¡

Mal, muy mal Sr. Director General lo que agravó cuando me dijo, con toda su cara dura , que no había leído el proyecto que iba a comentarle y que ya lo haría ¡Después de tanto tiempo ¡No sé si le dije algún improperio, y si no lo hice, me arrepiento de no haberlo hecho.

Un paleto, chupón consentido de la política, al que iba a ofrecerle un proyecto magnífico , del cual no hizo el menor caso, aun siendo que con él, iba a fardar más que un burro comiendo verde en un campo de futbol.

Otros más, con otro estilo más jodido, tampoco hacen caso a ninguna carta que se les remite, no pegando pique y sí interviniendo en aquello que les agrada como viajes y otros actos similares.

El no responder lleva consigo que a sus jefes , que todos tenemos en la vida, les lleguen cartas, no sé si tampoco las leen, protestando por la falta de atención, especialmente de empresas públicas, que tampoco trascienden y así nos va. Hay ciertos cargos en España que están siempre con sus Facebook, a cuestas, subiendo fotografías de su bien vivir y pocas, poquísimas de su ocupación.

Esto hace que el desánimo reine entre quienes queriendo hacer actividades, facilitando prestigio y dinero a la Ciudad o a la Autonomía, no puedan emprender ninguna relevante más que para perder su tiempo marranamente.

Hay, eso sí, momentos, en los que el político de turno ¡ por fin ¡ hace caso a un escrito que recibe y es cuando su contenido le favorece, pero… Coñe si lo quieren hacer otros yo que pinto?

Entonces, lee con detalle el escrito, y lo plagia, como determinados políticos plagian otras cosas, y así tan contentos.

Mira por dónde, que todo lo que copia es finalmente un gran éxito, cuando NO ES VERDAD QUE LO SEA, PERO ASÍ QUEDA MEJOR.

Con dinero público, plagiando y tildando de magnifico lo que no ha sido, así cualquiera.

 

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