Por Luis Gareta
Sánchez, director del Pollo Urbano ha ganado el Premio Zaborro de mecánica, un galardón que en Aragol se considera el nobel en esta técnica de inventar, construir, arreglar o manejar máquinas.
El jurado valoró la sencillez del invento y el gran beneficio en materia de salubridad que va a suponer para la columna vertebral de la enorme cantidad de usuarios de estas máquinas segadoras.
La incorporación de un inteligente asiento a la tracción general de la máquina BCS supondrá sin duda indudables mejoras en las presiones que soporta la columna vertebral del operario de esta máquina cuando está realizando su faena en terrenos no explanados.
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- Lambano Lambani entregando el Premio Zaborro
El premio que se concede por primera vez en nuestra comunidad está dotado con 40.000€ y será producido en serie después de los estudios pertinentes que realizaran los servicios de I+D de la DGA para obtener su homologación internacional.
Ingenieros de Topel España en Zaragoza están muy interesados en quedarse con la producción en cadena de este prototipo una vez incorporadas diferentes tecnologías de última hora que ellos ya están aplicando en su producción automovilística. La negativa de Sánchez a incorporar tecnología está siendo un gran obstáculo en el cierre del trato. “Mi invento es humano. Cualquiera puede apretar un tornillo, soldar un par de piezas o inflar una rueda. No veo yo mi máquina con componentes cibernéticos, sin menospreciar, por supuesto, a Norbert Wiener uno de los principales fundadores de esta ciencia. Mi máquina es para agricultores preinformáticos, donde la mecánica simple y al alcance de todos, democratiza absolutamente estas herramientas de trabajo. Prefiero que mis máquinas las haga un herrero que Opel España…¡Lo siento, pero yo soy así!”
El premiado ha prometido que en breves, aparecerá en estas páginas del Pollo Urbano, el tutorial paso a paso para la construcción de este singular vehículo y que todos los agricultores puedan transformar sus segadoras BCS o similares. “Estoy pensando en crear en alguna de las sedes del Instituto Superior Silvicultura Improductiva del Pollo Urbano (ISSIPU), en Osia, Jaca o Hinojosa del Campo, Soria, una pequeña fábrica para que los jóvenes agricultores anti informática, puedan venir a aprender a montar este tipo de herramientas. El Presidente Lambán está empeñado en que la hagamos en Ejea pero allí hay mucho ordenador…y no sé, no sé…”
Desde estas páginas felicitamos al premiado y le deseamos que haga realidad todos sus proyectos para una agricultura más humana y una difusión mundial de la Silvicultura improductiva gracias a sus brillantes logros en estas materias ¡Enhorabuena al campeón!
