Por Martín Ballonga
Una sección de éxito sin igual del Pollo Urbano y que ha que roto todas las previsiones lectoras. Se trata de una sección con píldoras, runrunes y comentarios que nos llevaran por pequeñas pistas a caminos de interés asegurado para nuestros lectores
Carles Puigdemont recibe a Javier Lambán, pero rechaza la exigencia de devolver los bienes de Aragón. Los dos gobiernos tampoco acercan posturas en el conflicto por el plan hidrológico del Ebro. El viaje de los pies fríos y la cabeza caliente.
A quien le están calentando la cabeza es al pobre Pedro Santiveri, a quien no se le mueve ni un pelo con esa gomina comprada en una peluquería con dinero del ayuntamiento. La oposición debería tranquilizarse, que un fijador es un producto más que necesario en una ciudad ventosa como Zaragoza para mantener el tupé en su sitio. También los ecologistas se le han echado encima porque la laca, demonios, contribuye a dañar la capa de ozono.
Para dar ejemplo, la oposición, con el zancadillas Carlos Pérez Anadón a la cabeza, ya se lleva de su casa el papel higiénico para no hacer gasto, ante cualquier apretón, a las arcas municipales. Lo que tendrían que hacer es que, desde sus domicilios, vinieran a los plenos bien cagaditos, bien folladitos y bien peinaditos. Y es que algunos solo cagan lo que comen… de sus dietas. Ya saben que muchos comen cosas que después de haber cagado aún están vivas.
Las buenas gentes que ahora se mesan los cabellos de indignación nunca han dicho palabra alguna sobre los gastos de aseo que los sucesivos moradores de las diputaciones varias y el consistorio cesaraugustano cargaron a expensas del común. El error de la alcaldía, si como tal puede calificarse, es no haber cargado el gasto de marras a los opacos gastos de representación, en lugar de, por una transparencia exagerada de la hacienda que maneja Fernando Rivarés, a partidas con nombres y apellidos. Pardillos, que sois unos pardillos.
Otra cosa muy distinta es la de los viajes, a todas luces injustificable y que debería resolverse con el pago de los dineros indebidamente cobrados, como, fíjense, aquellos gastos y facturas de la anterior corporación regida por Juan Alberto Belloch, por no hablar de la empresa de autobuses en su obtención de más de dos millones de euros para pagar despidos de su plantilla. O la movida de los ya famosos trece funcionarios. Con esas maniobras, el actual ayuntamiento zaragozano va a perder, en los próximos meses, juicios por valor de setenta millones de euros.
Como ven, toda una herencia gravitacional recibida del anterior ‘gestor’ Fernando Gimeno, al que le podríamos preguntar: ¿cómo actuaron los miembros del anterior consistorio en el consejo de administración de Plaza, ese invento que tantos millones nos está costando? Y es que más de un siglo ha tenido que pasar para que se pudiera verificar empíricamente la existencia de las ondas gravitacionales intuida por Einstein en 1915. Hasta ahora era uno de esos conceptos difícilmente demostrables que componen su compleja teoría de la relatividad. Las ondas gravitacionales de la corrupción afectan a muchos ámbitos, tanto nacionales como autonómicos y locales.
La corrupción la comete no quien la hace, sino quien se aprovecha de ella. Y no solo en términos de provecho económico. La corrupción debe muchos réditos en muy distintos ámbitos de la vida. Para empezar, cuatro años de cárcel y diez de inhabilitación para Ricardo García Becerril, Carlos Escó y Agapito Iglesias por el pago indebido de casi nueve millones de euros a Codesport.
¿Cuánta gente que no sale en este asunto estará mirando para otro lado? Agapito Iglesias llegó a través del fútbol. Todo lo que tocó desde su llegada a la ciudad se manchó de dudas y malas prácticas. Cuando estalló la burbuja todo su plan inmobiliario se vino abajo. ¿Recuerdan el nutrido palco de La Romareda cuando fue presidente del Real Zaragoza en sus tiempos de bonanza? ¿Recuerdan a esos “intelectuales” de esta ciudad inmortal presumiendo con la compañía de personajes mediáticos de la farándula u otras disciplinas? ¿Quién fue consejero de Agapito? ¿Quién me quiere a mí?
Habría que recordar que la esposa de Carlos Escó fue la consejera (y candidata) de Marcelino Iglesias. En efecto, nos referimos a Eva Almunia, quien daba por sentado que lo de Plaza no pasaba de ser una represalia política cuyas repercusiones judiciales quedarían en nada. Esta chica, como adivinadora, es un portento.
El exalcalde de Teruel, Manuel Blasco, no solo ha dejado plantados a los turolenses nueves meses después de ser elegido, sino que ha tenido la mala educación de no asistir al pleno en el que fue elegida su delfín, Emma Buj. “El relevo, que te lo dé tu padre”, le dijo a su sucesora.
Mariano Gil, compositor y guitarrista, hace las composiciones de la banda ejeana Tako, pero luego todos opinan y todo se hace entre todos. Ahora conmemoran sus tres décadas sobre los escenarios con un disco nuevo, ’30 pasos’, repleto de temas rápidos, medios tiempos y baladas. Todo un ejemplo de buen hacer musical y siempre poco a poco, como la vieja hila el copo.
El centro Buñuel de Calanda celebró el 116 aniversario –surrealismos aparte- del nacimiento del cineasta aragonés. Para ello se organizó una mesa redonda y otra cuadrada en la que intervinieron Alfonso de Lucas Buñuel, Porfirio Enríquez, Román Gubern, Pere Portabella y Marina Díaz. Después de la lectura pública del guion de ‘Viridiana’, se proyectó el documental de Javier Espada ‘Tras Nazarín’. Todos se quedaron dormidos. Y el bueno de Gubern hasta roncó.
La asociación que promueve salvar el cine Elíseos presentó su manifiesto en el teatro Principal. El equipo de trabajo está compuesto por gente de la cultura como Javier Macipe, Pablo Aragüés, Alejandro Cortés, Graciela de Torres, Jorge Asín, Marisol Aznar, Luis Rabanaque, José Luis Esteban, Mariano Anós, Miguel Ángel Aijón, Jorge Usón, Carmen Barrantes, Julián Casanova, Ignacio Fortún, José Ángel Delgado, Luisa Gavasa, David Lozano, Gaizka Urresti, Pepín Banzo o, entre otros muchos, Vicky Calavia. Esta última, desde la gestión del hecho cinematográfico en la comunidad, ha convencido a todos los participantes para visionar la película de Spielberg ‘Salvar al soldado Ryan’, porque, dice, “hay que perseverar para conseguir los frutos deseados”. Si consiguen salvar la sala, constató, “dejaré mi gestión cultural por un tiempo y me dedicaré a reivindicar la igualdad de género y aprender a leer”.
Tan preocupado que se muestra el ínclito Luis Alegre con la práctica del tiro al plato le recomendamos que en próximas fechas visite el antiguo cámping de Las Nieves, en Biescas, pues, veinte años después de la tragedia, los terrenos recibirán ese uso deportivo. Y así se puede poner en forma, que nunca viene mal.
Última hora. Fuentes de toda solvencia nos informan que a Gaizka Urresti lo expulsaron del País Vasco porque sus paisanos se enteraron de que lo operaron con anestesia.
