Por Jorge Moreno
La reforma fiscal que ha impulsado el Ejecutivo PSOE-CHA para este 2016 iba dirigida a penalizar a las rentas altas, pero ha tenido un efecto colateral menos publicitado por el Ejecutivo autonómico: los aragoneses con rentas medias y bajas han pasado a ser los cuartos de España que más impuestos van a pagar en su nivel de ingresos.
El motivo ha sido que mientras el Ejecutivo PSOE-CHA ha limitado su reforma fiscal a subir impuestos, otras siete autonomías han combinado las alzas con las bjadas en los tributos a trabajadores con ingresos moderados. En esas autonomías como Andalucía o Canarias del PSOE, han bajado de forma generalizada algún impuesto a quienes ganan hasta 30.000 euros y otras hasta los 45.000 euros. Esto ha supuesto que Aragón pase de ser la segunda autonomía con menor presión fiscal en 2015 a una de las que la tiene más alta en el 2016.
En comparación con otras autonomías, los principales damnificados aragoneses son las personas que ganan más de 16.000 euros pero menos de 45.000. Mientras en Aragón les han congelado el tipo de IRPF y les han subido otros impuestos como el de Sucesiones y los que afectan a la compraventa de una vivienda, en Andalucía, Castilla-León, Galicia, La Rioja, Cantabria, Navarra, Canarias y Murcia les han aprobado alguna nueva bonificación.
Lo más llamativo es que Aragón es la única Autonomía de toda España que ha decidido subir la presión fiscal sobre todos los impuestos estatales en los que tenía capacidad de actuación: ha aumentado los tipos en IRPF, Sucesiones, Donaciones, Transmisiones, Actos Jurídicos Documentados y Patrimonio. Al gobierno aragonés le sigue de cerca el gobierno balear, que en vez de subir seis impuestos como en Aragón, ha subido cinco de ellos.
En otros casos los que han subido a las rentas altas se lo han bajado a las medias y bajas, algo que no se ha planteado hacer el ejecutivo aragonés.
También el gobierno aragonés en el impuesto de Sucesiones castiga a todos aquellos que hereden por el fallecimiento de sus padres a partir de 100.000 euros, ningún otro gobierno ha introducido cambios para penalizar este tipo de herencias, y en cambio han aprobado más bonificaciones.
Otro aspecto negativo para Aragón, es que es la Comunidad que más paga por el impuesto sobre el Patrimonio las personas que tengan propiedades valoradas entre 400.000 y 800.000 euros, es el doble que el resto del País.
Todo esto para que luego digan que son partidos de izquierdas y progresistas y que ayudan a lo más necesitados.
