Por José Garrido, fotógrafo
Caminando por Zaragoza es posible encontrar un cristal con unas siluetas blancas, una mirilla con minicosas, alguna cosita medio escondida.
Cosas de Susana; también es posible encontrarse con ella de forma casual por la calle, en una galería de arte.
Para mí es más fácil ver a Susana o encontrarme contigo que ver sus trabajos pues cuando camino por la calle, normalmente voy mirando a la gente que me interesa más que los escaparates.
Susana además de sus cosas, organiza o está en exposiciones, encuentros con artistas, se mueve mucho y va y viene,
Nos encontramos a veces, siempre nos dedicamos unos minutos, un ratico alegre.
El otro día en la Casa Amarilla; volvimos juntos hasta San Vicente de Paul, hablamos de la vida, de cómo nos va, del arte, de la necesidad y la libertad de crear, de la emoción, de la ciudad, de todo eso.
-Mañana por la tarde pinto unos cristales en Gran Vía, ¿te vienes y haces una fotos?
-¿mañana? imposible, tengo un quehacer.
(estamos tan ocupados)
Bueno, cuando digo imposible, no quiero decir imposible imposible, quiero decir …, eso, que pude reorganizar mi tarde y pasar un rato por Gran Vía a ver su trabajo, hacer unas fotos y pegarnos una charleta.
Unos días después volvemos a encontrarnos, ahora en Don Pedro Atarés y acompañada de un señor.
-¡Qué bonitas fotos! ¡qué bonitas fotos!
-muchas gracias, muchas gracias, que me ruborizo.
-Mira, ¿conoces a Dionisio Sánchez? el del Pollo Urbano
-Pues a Dionisio Sánchez no, pero el Pollo Urbano sí.
-Encantado,
-blablabla
-blablabla
-blalala
-blalabla
-Bueno, que me marcho, ¡hasta pronto!
-Hasta luego
-¡Qué bonitas fotos!, hasta otra
Y aquí estamos.
Vale