Por José Luis Gamboa Urgeles
Creo recordar que este va a ser el sexto año que iré al encuentro de dibujo de Mambrilla de Castrejón un pueblito de Burgos de la ribera del Duero. La familia de Gorka emigró a Bilbao pero Mambrilla siguió siendo el pueblo de referencia. Yo no he tenido pueblo.
A Gorka como a muchos le picó el gusano del dibujo y lleva ocho años al frente de un evento que congrega a numerosos dibujantes.
Dibujo, vino, amistad y el sol terrible de Castilla son los ingredientes de este evento exitoso. En el camino a semejante sitio fui por la vereda del río Manubles y descubrí en Bijuesca El Chorro, nombre recurrente conque en Aragón se conoce a muchas cascadas (por ejemplo, en Belchite).
De aquel viaje me queda en la retina la iglesia de Torrelapaja, una joya cuyas pinturas del interior constituyen un secreto que ya tardan ustedes en visitar.
Al pasar por la provincia de Soria descubrí San Baudelio una ermita y cenobio construido en el friso de año mil. La maravilla son las pinturas interiores del cenobio.
Las descubrió a principios del siglo pasado un americano que las mandó arrancar y se las llevó para niuyor. Como pasó con otras joyas (por ejemplo el patio de la infanta) volvieron a España.
Están en El Prado, archivadas y no visibles para gentes vulgares como yo. En el interior de San Baudelio aún se puede apreciar alguna joyita.
A esta colección de dibujos añado unos que hice en Aranjuez y otros en Calatorao en otros encuentros de dibujantes, dibujantas y dibujantos.
