Por Mirinda Blasques
Del 27 de abril al 6 de junio, el gran maestro Luis Cortés exhibe sus últimas realizaciones en la Galería Ricardo Ostalé de Zaragoza. La exposición es una muestra de piezas del artista Luis Cortés, realizadas en madera de balsa, y en forma de esculturas articuladas que representan diferentes animales. El artista investiga una forma de expresión: el movimiento y estudia el origen de la forma en cuanto a la mecánica que la produce.
A TI, donaire alado, forma en vuelo,
raudo volumen que la luz reanima
y en el movible espacio determina
la paralela sombra de su anhelo.
Rafael Alberti
Las esculturas están compuestas por un número determinado de piezas unidas entre sí a través de distintos puntos de giro, lo que ofrece combinaciones múltiples y genera diferentes posiciones en cada una de las esculturas (ver piezas en movimiento en www.luiscortes.es).
- Águila IV
- Leopardo
- Estudio figura humana
- Dromedario
- Elefante africano
Para Luis Cortés, la forma es un diseño del movimiento y las esculturas son un estudio de la forma desde el punto de vista cinético. En esta exposición cada pieza se transforma en otras diferentes porque la realidad es móvil y lo inmóvil es solo aparente o relativo. Cortés ha utilizado madera de balsa como material para la realización de sus esculturas por ser fácil de utilizar y de pinchar con alfileres (cortos para definir los puntos de giro y largos para fijar la posición).
- Caballo IV
- Caballo V
- Rorcual común
- Mano articulada
La representación de la naturaleza viene dada por el gran número de ritmos y movimientos diferentes que muestran el reino animal y que Cortés refleja en piezas como ‘Águila’, ‘Leopardo’, ‘Elefante africano’ o ‘ Dromedario’, entre otras.
- Tigre de bengala
- Hipopótamo
- Alcón
- Tiburón blanco
Luis Cortés tiene un largo recorrido expositivo, sin embargo se preocupa más de los intramuros de su estudio. Centrado en las soluciones de movilidad de sus esculturas, visiona vídeos de animales en movimiento, dibuja, corta y pega madera de balsa, quita y pone alfileres a sus piezas, hasta que el resultado le parece real; «… captar la intención de los seres que represento»
Para este artista el momento más emocionante es el principio de una obra, en un proceso empírico e intuitivo.
Luis Cortés investiga una forma de expresión: el movimiento. Estudia el origen de la forma en cuanto a la mecánica que la produce, «la forma es un diseño del movimiento». Difícilmente termina sus esculturas porque en este complejo proceso de investigación los resultados definitivos son muy escasos, «tan sólo alcanzo alguna meta en momentos determinados». (http://www.muudmag.com)
Luis Cortés (Zaragoza, 1953) estudió Bellas Artes en la Escuela Superior San Jorge de Barcelona, alternando su residencia entre esta y su ciudad natal. Durante años se dedicó al diseño y los efectos especiales para cine y publicidad, combinando estas tareas con su dedicación a la escultura. Entre las exposiciones de Luis Cortés destacan las realizadas en Zaragoza, como la de 30 animales articulados que se instalaron en el casco antiguo de la ciudad (1996) o ‘Cadenas Cinéticas Articuladas’ (Sala Vinçon, Barcelona. 2000). En la actualidad reside en Barcelona y mantiene su taller en el barrio de Poble Nou.