Por Manuel Merano
Rafael nos ofreció una nueva muestra individual, titulada Retratos íntimos, que se presentó en la sala de exposiciones del Club Cultural de Empleados del Banco de Santander y que se pudo visitar hasta el 25 de noviembre pasado.
El artista tiene un proceso de elaboración de sus óleos sobre lienzo que comienza con una idea, o una fotografía de algo que le llama la atención, o una serie de elementos reales diversos que luego van generando en su cabeza lo que será la composición definitiva.
Es decir, se trata de una inspiración muy trabajada que sólo ve la luz cuando el autor estima fijado lo que quiere representar, aunque en ocasiones también parte de inspiraciones más repentinas que se ejecutan de forma casi inmediata.
Desde la fase anterior, genera bocetos sobre papel que traslada luego al óleo pintado y así surgen retratos pero, también, en otras ocasiones, escenas, paisajes, bodegones, obras dotadas frecuentemente de una simbología adicional y en las que los modelos originales han sido metabolizados por Rafael Gómez Pelufo hasta que ha conseguido plasmar su creación tal y como la concibe finalmente. No cabe duda de que, en el mundo pictórico de Rafael, los modelos sufren una profunda transformación producida por su mente artística.
Los retratos que aquí se exponen, así como las otras obras, están sujetos a la interpretación (que incorpora elementos oníricos y con apreciable influencia surrealista en ocasiones) del universo creativo de Rafael Gómez Pelufo y dejan patente su estilo inconfundible.
