Por José Luis Llera Gil
Cuando el próximo número de EL POLLO URBANO salga a la luz, ya se habrán celebrado las elecciones generales, conociendo sus resultados y advirtiendo posibles maniobras por parte de distintos grupos un poco decepcionados por los resultados obtenidos y no resignados a perder sus prevendas.
Cómo siempre digo, no voy a hablar de ningún tema político pues aunque podría hacerlo por mis experiencias anteriores, guardo silencio como el río Ebro cuando pasa por el Pilar.
Voy a referirme, por tanto, a otro tema sumamente importante cual es el aumento de las ventas de productos alimenticios de Aragón, una de las inquietudes y necesidades de numerosas empresas que se reúnen periódicamente para denunciar muchas carencias, según ellos, pero nunca para determinar que hacer de novedoso con vista a obtener este objetivo.
Siguiendo con mi artículo del número anterior, vemos como las empresas productoras se quejan de que no tienen las suficientes y necesarias ayudas de los respectivos políticos , para alcanzar y mantener unas cifras deseables de ventas. . Se habla mucho de exportaciones, lo cual no es cierto en su totalidad, ya que tan pronto algunas voces cuentan las excelencias de las cifras obtenidas como otras obvian acciones de éxito de la venta en España, que supone ventajas para quienes las potencian y ponen en práctica.
Sabemos a ciencia cierta que el Consorcio para el Desarrollo Integral de Teruel, ha intentado poner en marcha unas medidas sumamente novedosas, aplicadas en un Proyecto para la venta segura de productos de Aragón en el resto de España, pero que no ha merecido nunca, nada más, que el frenazo de algunos colectivos y de todos los políticos implicados en este cometido, y que no obtienen por ello nada más que la queja de sus productores. Lamentablemente, están acostumbrados, no sé por qué, a potenciar sus ventas con ayudas económicas de los Entes Autonómicos, Provinciales o locales y no a participar en acciones que como poco son novedosas y seguras del éxito para sus diseñadores y para quienes las utilizan.
El Consorcio para el Desarrollo Integral de Teruel, con sus 20 años de existencia, tiene intención de potenciar de nuevo y , una vez más, este Proyecto, repetimos muy interesante y a su vez especialmente necesario y rentable, con la duda siempre de si será acogido y apoyado (que no subvencionado) por las autoridades respectivas del Gobierno de Aragón.
Somos de los que opinan que al menos en el cambio de legislatura se pueden producir situaciones más favorables y en esa confianza estamos muchas personas que lamentamos la incomprensión de políticos y responsables de este sector que agrupa a un buen número de empresas y varios miles de trabajadores a los que se ofrecen medidas poco convincentes.
Vamos a ver dentro de algunos meses (pocos) cual es la acogida dispensada a esta iniciativa denominada ENCUENTRO PROFESIONAL DEL SECTOR DE LA ALIMENTACIÓN DE ARAGON y que, si no es favorable, este Consorcio la pondría en práctica en otro lugar de la geografía española.
El poseer amplios conocimientos sobre estos temas nos lleva a pensar que sería lógicamente bien acogida en otras Comunidades Autónomas, pero la de Aragón, sin duda, y el deseo de los diseñadores de esta iniciativa pesan mucho, y volverán con su habitual tozudez a intentar ponerla en marcha, aun cuando se aprovechen de ella también quienes tienen la responsabilidad de programar otras a este fin, distintas a las que llevan a cabo hasta ahora, que no son más que una simple copia que además cuesta mucha mucho dinero y que proporcionan escasos beneficios.