Mortal Kombat (político) / Manuel Medrano

PmedranoArtes1
Por Manuel Medrano
http://manuelmedrano.wordpress.com

    Este título de videojuego de peleas va en honor de un amigo que se asustó cuando, en una entretenida conversación, utilicé la palabra «matar», y se sobresaltó mucho pese a que el término lo empleé para hablar de muerte política y sociológica, a veces muy grave pero no tanto como la eliminación física.

    Pasado el meridiano de la legislatura autonómica y municipal, en Aragón estamos en preelecciones desde hace meses, y habrá difuntos, se lo digo yo. Porque, citando las expresiones que se declaman en la batalla inicial de la película Gladiator, no sé si vamos a ver «fuerza y honor» pero, a este paso, sí que veremos «ira y fuego».

   Los partidos políticos, sus candidatos en particular, van a tener que batirse el cobre mucho más allá de este bla bla bla teatralizado que tenemos que soportar hasta ahora. Vale ya de gestos. Queremos acciones ejecutivas y legislativas que nos beneficien a los ciudadanos de forma nítida y directa. Estamos hartos de tanta inteligencia emocional aplicada a la política, queremos líderes que no nos hagan trile con sus propuestas y programas. Dejen ya de castigarnos con actuaciones que parecen de las peores que padecemos en Facebook, machacándonos cosas imposibles adornadas con fotos de gatitos o bebés, que tanta emoción nos va a matar de aburrimiento.

   Yo quiero contraste de ideas, pero contrastadas en su exposición, a su vez, con la realidad. Y quiero saber no sólo las siglas de las candidaturas, sino también quién es quién de la oferta electoral que me hagan, su curriculum político, académico o profesional, y su vida laboral (también). Y, especialmente, muy especialmente, los RESULTADOS que estas personas han obtenido, en la gestión política y/o en su ejercicio profesional. Me interesa mucho saber qué beneficios han conseguido para los vecinos (en vialidad, infraestructuras, servicios, promoción económica -empresarial y del trabajo-), y qué han hecho por la CULTURA (Patrimonio Histórico, Artes Plásticas y de la Imagen, Música, etc.), incluyendo la demostración de si la consideran o no una actividad económica a promover para enriquecimiento de nuestros ciudadanos, para generación de actividades empresariales y profesionales, y para ofrecer a quienes, siendo de cualquier lugar del mundo, quieran disfrutar de ella.

   Es decir, me gustan las buenas propuestas, pero sólo si vienen avaladas por una clara trayectoria personal, aval demostrable al estilo de un concurso curricular: esto haría yo, pero es que puedo hacerlo porque ya he conseguido RESULTADOS en mi actividad previa.

   Vale ya de convertir la participación ciudadana en un tontódromo del que se benefician cuatro listos. Quiero un combate político con valores y activos en la mano, nada de alucines irrealizables o utopías que abusan de forma repugnante de la credulidad de los ciudadanos.

  Por cierto que, el personal, sigue con un cabreo monumental hacia la «clase política», continúa descreído y defraudado por lo que ve. ¿Que da lo mismo porque, al final, o votan a alguien o, si no votan, tampoco importa? Pues el que piense eso es un imbécil, ya que las consecuencias de ello son las dictaduras, de facto, sean de un signo o de otro.

   Así que, venga, al combate, sin olvidar que, como dijo el jefe galo Breno cuando conquistó la ciudad de Roma: ¡Vae victis! (¡Ay de los vencidos!).

Artículos relacionados :