Por Manuel Medrano
Conozco a Edrix desde hace muchos años, casi tantos como a su esposo, el crítico de arte y escritor Manuel Pérez-Lizano. Pareja muy agradable, volcada en la producción artística y la promoción de la Cultura.
Y era hora ya de que hablase de Edrix. Nuestra protagonista nació en Vega Alta (Puerto Rico), y dejó el clima tropical y las bellas aguas marítimas de su isla para venirse a la ciudad del Cierzo, en la que vive desde 1989. Inició su creación artística en 1992, con tendencia a lo geométrico, que fue acentuándose siendo ya determinante en 1994, utilizando planos monocromos alterados a su alrededor por zonas expresionistas de cambiantes coloridos. Desde finales de 1995 y principios de 1996, redujo la capa matérica de su obra, el espacio es móvil y con veladuras, el colorido es muy austero y nacen unas huellas repetitivas de cambiantes formas, las cuales ya se sugerían en su anterior etapa. Hacia febrero de 1996 se abre el espacio, las huellas quedan como un testimonio y los colores dominantes serán el negro, el gris plata y el amarillo oro. Todo ello acompañado por cuerpos irregulares de señalada fuerza que invaden el ámbito circundante. Cuerpos expresionistas, espacios, colores y huellas, cuando se dan, configuran un cambiante entramado en constante transformación. En sus creaciones realizadas desde 1999, los cuerpos geométricos irregulares, las formas acuchilladas y una especie de latiguillos que cruzan el soporte, se combinan con manchas y estallantes colores, sin pérdida, en ocasiones, de cierta sobriedad cromática flotando en un misterioso espacio.
En las creaciones que realiza en este siglo (2002-2013), se centra en fondos monocromos, con uno o más planos geométricos mediante brocha plana con varias capas de pintura, sobre los que incorpora objetos industriales (acero inoxidable) y vegetales (caña de bambú especialmente) de muy variada índole. La primera impresión que produce la obra es su extrema austeridad formal, sensación de perfecto equilibrio que inspiran sus campos rectilíneos, ordenados y tersos acentuados por un colorido puro, contrastado y sencillo en apariencia. A la vez, se observa una tendencia progresiva a incorporar colores fuertes, intensos, experimentando con cambios cromáticos.
En su actual etapa, que comienza en noviembre de 2014, se basa en abstracciones duras con planos irregulares y colores fuertes, cambiando de estilo y de gama cromática.
Edrix Cruzado lleva mostrando su obra desde 1995 hasta la actualidad, en exposiciones colectivas o individuales realizadas en Zaragoza, Huesca, Cataluña, Francia, Puerto Rico, etc., siendo la última exposición individual, en la que nos descubrió su nuevo estadio evolutivo, la denominada “Impulso del Plano”, presentada en Madrid en la Galería Art Room, Espacio Investigación y Arte, que finalizó el pasado 2 de junio.
Edrix, que tradicionalmente trabaja el acrílico sobre lienzo con brocha y termina detalles a pincel, realiza actualmente impresiones digitales con tintas pigmentadas sobre tela en pequeño formato (sólo una de cada obra), pintando luego la misma composición, pero en mayor tamaño, con acrílico sobre tela.
Además de incorporar algunas imágenes a continuación, pueden ampliar mucho la información gráfica observando obras de sus etapas anteriores en el sitio web de la artista (pulse en los enlaces para ver pinturas, series, instalaciones y su trayectoria) y en una muestra relativamente reciente que comenté (pulse aquí) pero, para conocer su etapa evolutiva actual, accedan al catálogo de su exposición “Impulso del Plano” pulsando aquí.
