Por Marisa Clarisa
Son días ahora de revisar el estado de las plantaciones de carrascas y robles en las fincas del ISSIPU para poder ir preparando la nueva repoblación y ser sabedores de la cuantía exacta de marras habidas en los plantíos anteriores. Mientras vamos descubriendo las plantas de 1, dos o tres años, es el momento de hacer los alcorques…
… que limpiarán la zona inmediata de malas plantas, airear la pequeña carrasca y que facilite el agua de lluvia o de riego si éste es posible cuando se planten las nuevas bellotas
Una vez realizado éste, vuelven a colocar el testigo y se repinta con spray rojo (lo que nos indica su edad y sobre todo su estado) y proceder a contabilizar la planta como “viva” dentro de la finca. Por el contrario, en las marras también haremos el alcorque para facilitar la realización del “pocete” donde irá la nueva bellota que en su momento plantaremos; y clavaremos, como es preceptivo, el testigo, esta vez pintado de azul para tener una visión general del estado de la finca.
Aprovechando esta labor, y puesto que algunos de los miembros del Instituto Superior de Silvicultura Improductiva del Pollo Urbano (ISSIPU) van a recorres a pie toda la plantación, también pueden ir haciendo una poda temprana (con mucho cuidado) de las pequeñas carrascas y robles para ir dirigiendo su crecimiento.
Es también el momento de cortar aquellos jóvenes arbolitos que han sido pasto del ramoneo de los corzos que, en este caso, han secado ocho de ellos, aunque bien es cierto que como poseían muchos hijuelos no será problema que continúen con su crecimiento y, además, nos servirán para obtener algunos retoños para intentar realizar alguna propagación por brotes, aunque la operación en este tipo de árboles no es sencilla, ni mucho menos.
Y cómo no, también se aprovechan estos días para hacer pequeñas reparaciones, en este caso, en la puerta de la finca donde se ha instado un nuevo sistema de apertura ¡Enhorabuena al Instituto por su encomiable labor!
