Por Daniel Sevillano
Comienza la segunda parte de la temporada y el momento que viven los dos equipos de Manchester es muy diferente. El Manchester United navega por la Premier League como buenamente puede, es séptimo, a trece puntos de su vecino el Manchester City que comienza febrero en lo más alto de la clasificación.
El primer año de la era post Ferguson está siendo algo cuestionado y criticado por la falta de regularidad en los resultados y en el juego desplegado, que acompaña a los diablos rojos desde que comenzó la temporada. Pese a todas estas circunstancias, el técnico David Moyes es apoyado por la mayoría de la grada, está bien considerado y tiene crédito de sobra para intentar colocar nuevamente al United en el lugar que debe ocupar en Inglaterra.
Por otro lado, el Manchester City está alcanzando un nivel espectacular de la mano de Manuel Pellegrini. Es un bloque muy sólido y fiable que no pasa la oportunidad de golear en todos los partidos que disputa. Ha hecho de su estadio un auténtico fortín, haciendo pleno de victorias, once de once partidos que ha jugado en el Etihad Stadium.
Gran culpa de la buena marcha del City, la tiene el delantero español Álvaro Negredo, que se encuentra en un momento de forma espectacular, convirtiendo en gol casi todo lo que toca. Pellegrini está sabiendo hacer funcionar a este gigante con potencial de sobra para pelear por cualquier título. Desarrollan un juego directo, de toque y muy explosivo que está convirtiendo a este equipo en una apisonadora.
Como todos los meses de febrero, la Champions League se reanuda con los octavos de final. El City tiene un “papelón” por delante, el FC Barcelona. Las bolas del sorteo querían un plato fuerte en la primera eliminatoria, para ir calentando la que para mí es una de las mejores Copas de Europa de los últimos años.
El técnico chileno se pronunció confiado tras el sorteo, comentando que el Barcelona ya no era el mismo que hace un par de años. Cierto es, que este Barça no parece ya tan superior a sus rivales como lo era en la época de Guardiola. El nivel que el equipo blaugrana demostraba entonces, era absolutamente brutal, asombroso y muy difícil de alcanzar otra vez. Su juego ahora es más directo que años atrás, ya no elaboran y mueven el balón de lado a lado hasta provocar el agotamiento.
Los jugadores del City están concienciados de poder plantar cara al Barcelona y tratar de eliminarlo. Llevar a cabo esta gesta, está en gran parte, en las manos de Pellegrini, del cual tengo muchas ganas de ver el planteamiento táctico que prepara para este duelo. Yo creo que meterse atrás no es la solución. Deben ser fieles a su estilo y salir al ataque y más en su propio estadio. Esta eliminatoria va a ser una guerra sin cuartel, en la que van a enfrentarse dos grandes potencias que lucharán por un puesto en los cuartos de final de la Copa de Europa.
En el otro lado de la ciudad viven esta eliminatoria con una gran confianza en su equipo ya que se enfrentan al que a priori es el rival más flojo del sorteo, Olympiacos dirigido por el español y ex entrenador del Sevilla CF, Míchel.
Esta eliminatoria puede cambiar y lavar un poco la cara del equipo y contentar a los aficionados. En el mercado invernal el United ha hecho un importante desembolso para hacerse con los servicios del centrocampista español Juan Mata procedente del Chelsea por 45 millones de euros. Una acertada gestión que viene con el objetivo de acabar con los problemas de fluidez e imaginación en la última parte del campo que ha estado sufriendo el Manchester desde principios de temportada.
Este mes de febrero marcará gran parte de la temporada para los dos conjuntos de Manchester tanto en la liga, como en competición europea. Ambos se enfrentarán en Old trafford justo al acabar este mes, veremos cual es su situación de cada uno de ellos cuando llegue este enfrentamiento.
