Por José Luis LLERA GIL
Que ya huele tanto cuento con los alimentos y la investigación médica es verdad. España, por ser un país bananero, por culpa de unos cuantos, no cabe duda, tiene que soportar el desaprensivo comportamiento de fabricantes de productos alimenticios adulterados y de investigadores de fármacos que no alcanzan a dar remedio curativo …
…para los que han sido inventados, amparados ambos por los políticos de medio pelo- No obstante, llegar y mantener estos extremos no complace a nadie ni como calidad alimentaria ni como remedio para la salud de los ciudadanos con graves enfermedades.
Quienes viajamos con frecuencia por países europeos comunitarios, vemos actualmente que en cuanto a alimentos, nos llevan años luz en calidad por el control que soportan sus elaboradores tanto por los medios de comunicación social unos, como el que sufren por parte de las autoridades los inventores de fármacos cuyos resultados no llegan nunca a aplicarse. Al menos nos da esa impresión y es bastante..
Afortunadamente, numerosos espacios de Radio y T.V.en nuestro país, de vez en cuando, detectan muchas anomalías que transmiten a los consumidores, haciéndonos tener serias dudas sobre si podemos o debemos consumir determinados alimentos que, hasta ahora gozaban de nuestra confianza o tomar ciertos medicamentos que , también con cierto escándalo y de vez en cuando, son retirados de las farmacias.
Cualquier hecho de esta índole, es decir un mal descubrimiento, va acompañado de una importante (?) multa, que no es ni medianamente un castigo para los infractores, sino un querer y no poder y un continuar con la misma trápala pero libres de falta como los futbolistas que cuando suman cinco tarjetas de castigo en partidos anteriores y cumplen lo estipulado en sus respectivos Reglamentos, inician una especie de nueva etapa libres de culpa.
Si ciertamente es así, y aun cuando la actuación de algunos de ellos origina serias multas a sus elaboradores (que es fácil no se lleguen a pagar), en todos los casos antes de ponerlos a la venta deben ser investigados por técnicos bien cualificados y no por otras personas que están muy lejos de ser los idóneos para hacerlo. No después sino antes.
Ciñéndonos un poco más en el caso de los alimentos, bastantes de ellos llevan algún aditamento como colorante, conservante o edulcorante, que no es nocivo para la salud del consumidor, (al menos lo que opina nuestro Gobierno), pero no dejan de serlo si se consumen como es el caso de España, durante muchos años. Esta es la razón por la que fallecemos algunos años antes de cuando debiéramos si no hubiéramos ingerido estos alimentos. ¿ Qué no es verdad? ¡ Vamos, no me haga Vd. reir.¡ Como ejemplo. ¿Sabe Vd. lo que es el tanino?
Actualmente da la impresión de que se vigila todo, pero la verdad es que cada día salen a la luz más y más infracciones. ¿Quién tiene la culpa? ¿ Que nos digan quien la tiene?.
Esta es la verdad y no me vengan con cuentos,¡ Poderoso señor es el dinero’
Capítulo aparte, merecen los medicamentos. En cuanto a los resultados obtenidos después de una larga investigación, si fueran verdad, sucedería lo contrario que es que viviríamos muchos más años de los que actualmente podemos contar. Es decir, y repito, lo contrario que con la ingesta de alimentos.
¿ Cuántos medicamentos han surgido de la investigación de expertos que ellos mismos han cantado sus excelencias? Pongo por ejemplo el cáncer, que tantas muertes causa al año, y que si fueran tan eficaces para combatir esta grave enfermedad, según nos dicen, ya no nos moriríamos a los 80 / 85 años sino a los 120.
No digamos otros medicamentos, que después de estar tomándolos cientos de enfermos , sin solución de continuidad, se dan cuenta quienes tienen la obligación de hacerlo antes de salir al mercado, que su composición es peligrosa para la salud y es retirado de la circulación.
Dejo aparte, para otra ocasión, aquellos otros medicamentos que sin ninguna fórmula curativa salen a la luz, pero todo esto es una vez más el timo que algunos ciudadanos son capaces de hacer aun jugando con la salud y obviamente con la vida de los ciudadanos.
¡ Vergüenza nos tenían que dar estos hechos que son la risa de toda Europa !