Echenikón: ¡Ta tomá pol culo tol Aragol!


Por Al Caponi

    Al faraón Echenikon, serio aspirante al Premio Pichorras del 2020 que organiza la veterana peña Caracolera de Zarabola, no lo quieren ni  los que comen de su propio cucharón.

    El grado de rechazo que ha obtenido en Aragón sólo  fue sido superado por otro pájaro cuyo grado de megalomanía y soberbia alcanzó cotas inimaginables en la reciente política aragonesa. Nos referimos  al famoso Jeromonsky, petulante  superconcejal  lanzado al estrellato por el peor acalde que ha tenido la ciudad (Mr. Beloki)  tras la bostezante gestión del rojerío que lideró Santiveri  y que actualmente se halla disfrutando del paraíso que obtuvo en Bruselas tras dejar un reguero de desaciertos  sin precedentes en la ciudad del Ebro.

-¿Cómo se ha atrevido Su Eminencia  cuestionar al gran Prohombre Echinikón, Gran  Faraón de Aragol?

-Porque ya estamos hasta los huevos de estos principiantes que no saben lo  que es negociar. Si por Echenikón fuera, La Maru y yo estaríamos comiéndonos los mocos mientras el Bablo vive en un palacio de cateto millonario y el propio Echenikón quiere comprarse el aereopuerto “Don Quijote” de Ciudad Real para aparcar con comodidad su silla multifunción.

-¿No teme Su Majestad  represalias por parte del “устройство”(aparato) estalinista de Podemos?

-Me parece que Podemos, tras la metedura de pata de Bablo Catedrales anteponiendo sus intereses particulares y de clarísimas ambiciones vicepresidenciables  a negociar   un pragmático gobierno de progreso, se va a quedar  para vestir votantes peregrinos. Al final, de ser una fuerza emergente extraordinaria, nos vamos a quedar, tras las próximas elecciones,  con los mismos votos que tuvo Julio Anguita.

-Pero aquellos votos, Flor de Osera, iban todos a una mano mientras que los de Podemos son de  ”mareas”, “morados rojos”, “morados amarillos” “confluencias con Pichorras”, etc…

-Eso es cierto. Pero nosotros (la Maru y yo), una vez que hemos tocado marro vamos a demostrar que- como el PAR- estaremos en política hasta nuestra jubilación…

-¡Ahí está el verdadero Escartín,tin,tin! ¡Qué aprendan a negociar los de Madrid. ¿Y con Exchenikón qué hacemos, Maestro?

-¿Echenikón? ¡Ta tomá pol culo tol Aragol!.

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