Siguiendo la vieja tradición española de este género, Gonzalo Del Campo nos trae hasta estas páginas la octava parte de un extensísimo Cancionero que abarca nuestra historia sociopolítica desde 2011 hasta 2015. ¡Enhorabuena por el esfuerzo y que lo disfruten nuestros lectores!
El sprint final en tiempo de descuento
Esta es la recta final,
descomunal esperpento,
de la actual legislatura,
que siempre ha ido en aumento.
Ha llegado a ser un circo
de tamaño gigantesco
donde todos actuamos
con ganas o sin quererlo.
Sería largo glosar
tantos acontecimientos
que en estos últimos años
nos han ido sucediendo.
Otra vez las votaciones
nos reclaman el derecho
que todos los ciudadanos
de vez en cuando ejercemos.
Cuatro años han pasado
que me han parecido eternos,
más un mes, exactamente,
desde que están los peperos.
Nos han dejado a su paso
hazañas para el recuerdo
que por más años que pasen
sin duda, no olvidaremos.
Sanidad y Educación
fueron su crimen primero
pues les dieron cuchilladas
igual que los navajeros
que manejan la herramienta
rajando a diestro y siniestro
sin pararse a comprobar
si el herido ya está muerto.
Actuaron con la saña
propia de unos carniceros
que despiezan el ganado
dejando apenas los huesos.
Eran solo avanzadilla
de lo que ha de venir luego
si no paramos los pies
a estos y demás rateros
que el TISA y el Teteype
quieren en vena meternos.
A un mes de las elecciones
solo importa el postureo
salir en televisión
es lo vital y puntero.
Quedar bien en las encuestas
es ganar parte del “cielo”
donde solo caben cuatro
que se reparten el juego
con apoyo de los medios
que ayudan al compadreo
para que el bipartidismo
no deje paso a algo nuevo.
Rajoy juega al escondite
cada vez que hay un debate,
dice que emplea su tiempo
en cosas más importantes
como comentar el fútbol
un domingo por la tarde
mientras propina a su hijo
collejas edificantes
para que aprenda muy pronto
que mentir es todo un arte
y uno se ha de reprimir
para ir siempre por delante,
adulando si es preciso
a quien ha de apadrinarle.
¿Qué prefiere don Mariano?
Que le entrevisten aparte
y que nadie le pregunte
algo de lo que no sabe
o que no se lo haya escrito
un amanuense fiable.
A él le gusta lo de siempre,
conversación agradable,
en el sofá de Bertín
que resulta confortable
aunque no pueda fumar
delante del respetable;
estar con Pedro Piqueras
en formato presentable
sentado, de vis a vis,
y no con tres aspirantes,
de pie y unas cuantas horas,
teniendo que contestarles
sin que los malditos tics
sus mentiras le delaten.
Echa de menos el plasma
donde nadie le rebate,
pero al estar en campaña
no puede dar tanto el cante
y seguir con sus manías
sería todo un dislate.
Una charla con Pedrito
será su mayor desgaste
porque eso del “y tú más”
es lo que mejor se sabe
y es su arma preferida
para ese contrincante
que nos dará un recital
de las mismas vacuidades
que vienen sonando a hueco
desde aquel primer instante
en el que fue el elegido
para ponerse al volante
de un partido socialista
con ñapas por todas partes.
También irá con la Campos
a dar su mejor imagen
de hombre cercano y normal
buen marido y mejor padre
y no le preguntará
por lo que pasa en la calle,
la pobreza y los desahucios
la corrupción y el desmadre
de la Gurtel y los sobres,
por Bárcenas su compadre,
por su puesto en Santa Pola,
por el gasto que se hace
en armamento exportable
a los países amigos
con dictaduras fiables.
Tampoco preguntarán
por los miles de emigrantes
que abandonan el país
y dejan de ser votantes
porque darían su voto
seguro, a los contrincantes
y no se lo ponen fácil
para mejor castigarles.
No dirán ni mú del IBI,
de que la Iglesia no pague
por esos miles de inmuebles
que le llovieron del aire.
Desde un rincón de Doñana
Rajoy escucha el debate
al que ha enviado a Soraya
para que hable de su parte
y así poder disfrutar
sin nada que le atragante
la paella de Marbella
que es lo más importante.
Además de cobardica
demuestra ser miserable,
cuando muestra su desprecio
por los demás aspirantes
y sigue como si nada
tratando de subnormales
a todos los ciudadanos
adeptos y no votantes.
A esto habría que añadir
sus palabras al alcalde
con frases incoherentes
que no las entiende nadie
y cualquiera pensaría
que las dijera un orate.
También intentar mentir
lo creo un gran disparate
para intentar retener
un puñado de votantes,
aunque decir la verdad
no es lo más importante
para quien lo de engañar
siempre ha sido una constante,
aunque se trate esta vez
de noticias que se saben
y es imposible esconder
incluso a los ignorantes,
pues ha sido un atentado
a manos de talibanes.
Murieron dos españoles
según noticias veraces
y Rajoy adelantó
informaciones mendaces
diciendo que era un herido
por daños colaterales.
Con lo contento que estaba
con sus planes estelares
de reducir los impuestos
a quien no se jubilase.
Vaya cantidad de votos
iba Rajoy a sacarse
con los de su propio gremio
y con otros similares
que tan solo se jubilan
cuando llega el jaque mate.
¿Y qué hay de todo el equipo
que comenzó la andadura
aquel veinte de noviembre
de nueva legislatura?
Algunos ya se han marchado
a puestos de más altura,
como el ministro Cañete
experto en agricultura,
hoy en día Comisario
sin necesidad de urnas.
De manera digital
le aconteció la fortuna
de recalar en Bruselas
donde la vida no es dura
y seguirá alimentando
su bien ganada gordura
y haciendo buenos negocios
desde su actual tesitura.
Wert, refugiado en París
muy lejos de la amargura
de habitar “Dans les banlieus”
pues fue toda una figura,
al lado de su mujer,
de fidelidad perruna
al proyecto de Mariano
de acabar con la Cultura
a base de acuchillarla
con saña más que tozuda.
También la Mato se fue
dejando tras si la duda
si era una tonta del bote
o su cara era más dura
que pedernal de granito
de recias arquitecturas
lo mismo que otros colegas
de la misma catadura.
¿Qué ha sido de Gallardón
y su rutilante estrella
de ministro poderoso
de justicia, con cartera?
No se sabe de seguro
con suficiente certeza
si seguirá en el Consejo
que salió de la chistera
de doña Esperanza Aguirre
la ocurrente presidenta,
pues prometió la Cifuentes
acabar con la prebenda
de ocho mil quinientos euros
con que Gallardón se queda
junto a otros cuantos vivales
que ejercen de consejeros.
De lo que dijo la Cifu
no hay nada por el momento
y creo que no lo habrá
por mil años que esperemos
pues no hay apenas promesa
que no se la lleve el viento
si se promete en campaña
donde casi todo es cuento.
En las últimas semanas
de Montoro nadie sabe,
está fuera de campaña
por ser poco presentable,
mejor es que salga Hernando
diciendo barbaridades
o, si no, Pablo Casado
que miente sin inmutarse,
eso sí con cartelitos
como si estuviera en clase,
todos bien plastificados
que resultan más fiables,
aunque con ellos defienda
a una banda de rufianes.
La Cospe está congelada
para que no se desgaste
pues es la mejor tijera
que ayuda a Rajoy, el sastre,
a recortar los servicios
y explicar lo inexplicable,
dando por bueno a su jefe
aunque sea abominable
su manera de afrontar
todo lo que es importante
salvo el asunto del fútbol
que domina como nadie
y eso de fumarse un puro
que es cosa muy relajante
y le hace afrontar las cosas
con reposado talante.
Don Jorge Fernández Díaz
es un ministro beato
que reza todos los días
a Dios y a unos cuantos santos.
Ellos marcan el camino
que inspira todos sus actos.
Es miembro de Opus Dei
que acude a misa a diario.
Fue elegido por Rajoy
por ser un fiel aliado
y ha mantenido su puesto
a lo largo de cuatro años
a pesar de tantas pifias
como ha protagonizado.
En su obsesión por la ETA
nunca jamás ha reblado
para él , el alto el fuego
fue siempre papel mojado
para acercar a los presos
o hablar de que cambie algo.
Solo el arrepentimiento
sirve para este cristiano,
que el enemigo abandone
humillado y desarmado,
solo entonces se hablará
de paz para el País Vasco
y de que los presos vengan
a algún presidio cercano,
que no obligue a sus familias
a pagar también el daño,
añadiendo más castigo
al que cumple el condenado.
ETA se disolverá
por las buenas, si no a palos.
No hay nada que dialogar
pues solo ellos son los malos.
Nunca existieron los GAL
ni la violencia de Estado
ni tampoco la tortura
que tanto se ha denunciado.
Las víctimas de esta guerra
no existen más que de un lado
lo demás son menudencias
con las que se ha intoxicado
a virtuales terroristas
que están muy equivocados
y que, como delincuentes,
han de ser reeducados
como el gobierno disponga
imponiendo también cuando.
A tres meses de empezar,
primera prueba de fuego,
la policía en Valencia
golpea a diestro y siniestro
a estudiantes que denuncian
los recortes del gobierno.
Heridos y detenciones,
policías pendencieros
que a los menores de edad
tratan con mano de hierro,
igual que a unos delincuentes
chorizos o navajeros
como si esgrimiesen armas
dirigidas contra ellos.
Tan solo llevaban libros,
macutos y lapiceros,
pero el pensamiento es algo
que no debe ser expuesto
a vista de todo el pueblo
para expresar sin tapujos
todo el mal que se está haciendo.
Fernández lo tiene claro
el orden es lo primero,
defender la represión
es actuar con talento
y en todo caso admitir
que pudo haber cierto exceso
ya que la prensa extranjera
fue testigo del evento
y no hay que negar del todo
lo públicamente cierto.
Para acabar de arreglarlo
ha dicho Antonio Moreno
el jefe de policía,
sin reflexionar primero
“ellos son el enemigo”,
radicales y violentos
infiltrados en las filas,
habrá que ponerles freno.
Dicen algo parecido
algunos otros peperos.
Echan la culpa a la izquierda
que ha sacado de contexto
los hechos y las palabras
con fines muy torticeros.
El ministro de Interior
justifica lo ya hecho
y abre con resolución
lo de conculcar derechos
y preparar una ley
que nos lleve a todos tiesos
para así no protestar
ni decir lo que pensemos,
sin que nos caiga una multa
o que “se nos caiga el pelo”,
como tanto se decía
en tiempos de mis abuelos.
En marzo de dos mil doce
Valencia sirvió de ejemplo
para iniciar la estrategia
de jugar a meter miedo
indiscriminadamente,
con ademanes violentos
que el Estado justifica
por ser quien puede ejercerlos
con la exclusiva legal
que le otorga el parlamento,
su tóxica mayoría
no necesita argumentos.
Ese mismo mes de marzo
ya se anuncia una reforma
en el código penal
para readaptar la horma
de las leyes, al zapato,
aún más estrecho, de normas
con que nos quieren calzar
de cualquiera de las formas.
Será delito el hurtar
un bolso, algunas monedas,
sin ser igual que robar
sobre todo si es a espuertas
porque de forma habitual
se trata de otra manera
a quien sustrae millones
porque, aunque sean rufianes,
se les trata de señores
y no es fácil encerrar
a semejantes ladrones.
También la desobediencia
a la autoridad supone
penas de multas y cárcel
como la urgencia dispone
para impedir que se acuda
a las manifestaciones
y no demos mala imagen
de cara a otras naciones.
Se incluye como delito
la resistencia pasiva
por no dejar cabos sueltos
en la nueva iniciativa
así, aunque no hagamos nada
estaremos en la vía
de ser cabezas de turco
para jodernos la vida
con multas muy abultadas
o la cárcel por mil días,
como a los ocho de Yesa
a quien no dejan salida,
debiendo pagar las multas
impuestas por la justicia
y esperar a que les juzguen
por su labor delictiva
de tener su dignidad
como única salida
y enfrentarse a la violencia
sin que les pueda la ira
tan solo con las palabras,
aunque luego, con mentiras
pretendan desactivarlos.
Ójala no lo consigan
y que en un caso tan claro
quede la verdad encima
y no paguen inocentes
víctimas de tropelías.
“Las uniones homosexuales no garantizan la supervivencia de la especie”
Lo del matrimonio gay
para Fernández es malo
porque es antinatural
y es un horrendo pecado
el que dos hombres se casen
o vivan amancebados.
La religión debe estar
mucho antes que lo aprobado,
lo coherente sería
en un país tan cristiano
según el señor ministro
no haberlo nunca aceptado.
Lo ha dicho públicamente
en el mismo Vaticano.
Aunque sea un verso suelto,
claramente lo ha soltado
porque es hombre religioso
más allá de ciudadano.
Acaba por parecerse
a un muláh fanatizado
pues no concibe vivir
sin estar mediatizado
por los valores y ritos
apostólico romanos
que ven en la democracia
enemigo declarado
al permitir la existencia
de un pecado tan nefando
que hace peligrar la especie
más que el santo celibato,
que obliga a curas y obispos
a enfundarse el aparato.
Algún miembro del Pepé
de esto se ha desvinculado
pero don Fernández Díaz
seguirá bien amarrado
a su cartera y sillón
pues es Dios quien le ha inspirado
y Rajoy, que es su profeta
quien, firme, lo ha colocado
para acabar la misión
que se le ha confiado
de elaborar una ley
que amordace al ciudadano.
“El aborto es una cosa
que tiene que ver con ETA
eso si, no demasiado”
otra perla que nos suelta
Don Jorge el “iluminado”,
a quien le sopla las frases
algún lúcido prelado
mientras está de rodillas
en cualquier confesionario,
para que luego las suelte
con ese verbo incendiario
al que no calla ni Cristo
con un golpe de incensario.
Es la contra de Rajoy
que permanece callado
o habla del mal día que hace
cuando se le ha preguntado
por Bárcenas y la Gurtel
o por cualquier imputado.
Concertina: “elemento pasivo de disuasión”
A fines del dos mil trece
se habla de las cuchillas
instaladas en las vallas
en que se envuelve Melilla
para evitar que inmigrantes
se las salten por encima.
Tienen un inocuo nombre
pues se llaman concertinas
igual que los acordeones
que tocan en Argentina.
Dice el gobierno español
que no es cosa tan dañina
pues se ven en cualquier cárcel
y apenas provoca heridas
a los que intentan fugarse
y toman esa salida,
además también la emplean
en las cumbres protegidas
para aislar del populacho
y sus tan terribles iras
a esos marcianos con traje
que se nombran señorías
o a esos grandes potentados
blindados por policías.
También en las nucleares
están por doquier tendidas
lo mismo que en cualquier puerto
a prueba de raterías.
Con argumentos así
toda la ciudadanía
se olvidará del asunto
y acabará convencida
de que las cuchillas son
blandas como mantequilla
o tan solo un mal menor
frente a una España invadida
por tantos desarrapados
para los que no hay cabida.
Otro asunto muy oscuro
que afectó a este personaje
fueron las destituciones
de unos cuantos responsables
de investigar a la Gurtel
y otros hechos relevantes,
que dejaban al pepe
totalmente el culo al aire.
Un jefe de policía
no consintió en doblegarse
para informar al ministro
sin haberlo hecho antes
al juez, como es lo legal
y normal en cualquier parte
donde haya una democracia
no sometida al desgaste
de un tosco autoritarismo
que no puede controlarse,
echando de su trabajo
a buenos profesionales
por perseguir la verdad
y no querer relajarse
persiguiendo delincuentes
amigos o familiares
de quien ocupa el poder
y no quiere investigarles.