Poemas de Julio Donoso: La danza (2ª parte)

donoso-woodstock-69
Por Julio Donoso

     «Aún hoy en los tiempos presentes, donde poco espacio queda ya para la lírica, donde hay cada vez menos jóvenes dispuestos a sacrificarse como antaño por el ideal de la gloria literaria, digo, aún hoy, Atenea y Apolo, —tal vez por diversión, tal vez por añoranza—  tienen a bien dejar escapar un alma sensible y soñadora, un alma incomprendida que boga en las prosaicas y fútiles urbes de hogaño intentando rescatar a la sociedad de su marasmo cultural.

   Y es en la capital del Ebro, donde hoy día podemos encontrarnos a uno de esos astros abandonados, representante de una raza ya extinguida de bohemios literarios, de paladines pobres y algo pícaros. Este personaje del que queremos hablar se llama Julio Donoso, más popularmente conocido en los cenáculos artísticos como Donoso. En breve descripción física se puede decir de él que tiene el pelo negro como el plumaje de los cuervos, ojos vivaces y adintelados por unas marcadas cejas, y una faz que sirve de lienzo para las cambiantes muestras de su estilo velludo un tanto desastrado; porta además una particular cojera aliviada en esforzado paso por un ditirámbico bastón tomahawk. Así es, y así podrán verle aquellos que visitando la ilustre ciudad se atrevan a pisar alguno de los pequeños locales que la jalonan y sirven de refugio último a la gente sencilla, pues es en ellos, con los suyos, donde gusta prodigarse».

http://poemasdelpurgatorio.blogspot.com.es/2012/08/julio-donoso-la-locura-de-un-poeta.html

 

La danza (2ª PARTE)

 

X.

Usted es bella

usted es clara

como una vela en la noche

que me hace esperar el alba

los pájaros en la plaza

el jugar de los niños

como el café de las terrazas.

 

Mañana y no mañana

dentro de mucho

cuando usted me llame.

Yo pienso estar enamorado.

Enamorado de usted

y amándola como la estoy amando.

Amar su belleza

amar a su alma.

amar, amar, amar

y amarla.

 

XI.

Si cuando explico mi querer

ni yo lo entiendo

como voy a pedirle

que me quiera usted.

 

 

XII.

La tengo en estima

mi pena es grande

y mi situación mala

 

pero si vale todo

para que mañana la vea

y no mañana

un día cualquiera

 

entre todos los días

un día bonito

no porque lo sea

si no porque usted lo crea.

 

 

XIII.

Mi miedo es mío

pero influyes tu.

mi miedo es no verte más

irme de este mundo

sin esa veta de amor en los ojos tuyos…

y los míos, idos como ausentes

 

mi miedo es frío y oscuro

es que se pare la danza

es miedo a la muerte

a la suya

a la mía

a la de los dos.

 

tengo que dejarte

entre los ensayos

y las arenas.

 

 

XIV.

Me tendré que ir algún día

arrastrando soles

esquivando lunas

pero quiero su mirada

la suya y no la de otra

su mirada firme

su mirada pendiente

su mirada etérea

la confirmación de mi duda

el estilo y la iconografía

de este amor presente

que muere ausente.

 

 

El aire del baile

El aire del baile

me llevo a la calle

que bendijo tu pie

y tu donaire

espero que bailes

el baile bailarín

de mi balada

baile, bailarina

danza que danza danzante

danzarina danza

baile, bailarina

bailarinamente baila.

La balada

que bailan mis labios

las lágrimas de mis bailes

el baile de mis lágrimas

las lágrimas que bailan

y es todo bailar

llorando bailar

bailar bailando

el caos y la confusión

y no dejar de bailar

el baile confuso

de ese baile

eterno que baila

el baile del aire.

 

XVI.

¡Ay hermosa mía!

déjame hablar con tu cuerpo,

contigo a solas

que mi negocio son los versos

pero mi ansia es tu cuerpo

tómatelo a tu antojo

y no como un guante que te tiro

eso sí, arrójame un beso

o un hueso

que serás mi dueña

y yo tu perro.

 

XVII.

Un fantasma del pasado

se posa tan lentamente

en cada recuerdo vano

sin estar en mí presente

viviendo sólo letargos.

Ese fantasma del pasado

me entrega evocaciones

se lleva mis ilusiones

¿es pasado o pesado?,

de cualquiera o nuestro

quizás tuyo, tal vez mío

no es ser línea, es verso.

Yo fantasma del pasado

meapilas, tonto desquiciado

soy un fantasma del pasado

en primavera y en verano.

 

XVIII.

Ya sé que mi amor

es símbolo

el tuyo duda

y el de los dos azar

si en la mirada de la luna

me encontraras mirándola como un gato

si la luna con un lazo nos uniera

ahora que estoy más sólo que la luna

intuyendo que tu amor es duda

el mío símbolo

y el de los dos azar

y tu amor confirma mi duda

que es sólo símbolo

Véase ¿? AMOR ¿?

 

XIX.

Tu silencio

es una jungla

no de asfalto

que es la real

sino verde

como la verdadera

razón

del silencio.

El silencio

es no saber.

Es bello su silencio

quiero formar parte de ese silencio

es maravilloso oír en mi verso el eco de su silencio.

 

Gehenna

Tengo la mente difusa

mi misa, mi musa

haciendo cábalas con la mirada.

 

Buscando en los monederos falsos

sentimientos bizarros

lo escucho, lo oigo.

 

Escondido de los hombres

para escribir tu nombre

en la pizarra de mi alma.

 

Pienso, busco en mi entraña

las lecciones pasadas y escribo

las razones de los textos sagrados

las pasiones que cantan los gitanos.

 

Y es que en ti, sentí

el pálpito y el púlpito,

mi religión, mi catecismo de pasión

consagré mi sentir a un ruego inútil

y después caí…

 

Estábamos muy alto

y cómo el más bello de los ángeles

caí defenestrado

sólo rodeado por mis demonios.

 

Ángel caído que va, que sobrevuela

 la ciudad.

Pobre diablo

en su infierno.

Artículos relacionados :