Por Germán Oppelli
Emprendida tras el éxito comercial de ‘El mayor espectáculo del mundo’, la película dirigida por Cecil Blount de Mille en 1952, el realizador británico Carol Reed se enfrenta a ‘Trapecio’ cuatro años después, según la novela de Max Catto adaptada por Liam O’Brien.
Estamos ante un convencional melodrama circense interpretado por Burt Lancaster, Tony Curtis, Gina Lollobrigida, Katy Jurado, Thomas Gómez, Minor Watson, Gerard Landry, J.P. Kerrien y Sidney James. Las escenas circenses, fotografiadas en cinemascope por Robert Krasker, se desarrollan en el Circo de Invierno de París, donde también fueron rodadas en 1928 las del filme ‘La Venenosa’, de Roger Lion, con Raquel Meller de protagonista principal.
Producida por James Hill y con una banda sonora de Malcolm Arnold, la película es de una realización bastante endeble, tal vez debido a un guion poco inspirado de James Webb y, sin acreditar, Wolf Mankowitz. Cuenta la historia de Mike Ribble, uno de los pocos trapecistas que ha conseguido realizar con éxito el triple salto mortal. Sin embargo, tras sufrir un accidente mientras lo intenta, acaba trabajando de tramoyista.
Se trata del debut en Estados Unidos de Gina Lollobrigida, lo mejor de la función, que decididamente eclipsa a los galanes. Una escena recoge a la actriz italiana en un arriesgado ejercicio de aparatos de altura. Hay que decir que en ‘Trapecio’ aparecen diversas atracciones circenses reales, unas rodadas en ambiente y otras en las que se doblan a los actores principales. Georgette Frediani se viste de Lollobrigida y Tony Curtis es doblado por Fay Alexander, uno de los mejores volantes del mundo. A pesar de ello, en la película no se da el triple salto mortal, pues nadie hubiera podido hacer concienzudamente el doblaje.
En ‘Trapecio’ solo se ve el triple cuando los protagonistas pasan una filmación añeja de la que existen escasas copias en el mundo y en la que aparecen Los Codona en plena actuación. Allí, en aquel viejo celuloide, sí que se daba el triple salto mortal. A Lancaster no hizo falta doblarle, pues dominaba estos ejercicios en el Circo Kay del estado de Virginia, antes de decidirse por la carrera cinematográfica.
EL ELEFANTE
En la cumbre de su fama, Doris Day interpreta en 1962, para la Metro Goldwyn Mayer, la película ‘Jumbo, la sensación del circo’, dirigida por el estadounidense Charles Walters, con un guion firmado por Sidney Sheldon. Jumbo es el nombre del amaestrado elefante que pasa por ser la principal atracción del Circo Wonder. La trama es amorosa y de rivalidad entre dos circos que tratan de hundirse el uno al otro (esto, desgraciadamente, ocurre en la realidad circense).
La película, con una colorista fotografía del operador William Daniels, es una muy curiosa comedia musical con un elefante que lo mismo sirve para realizar números circenses que para poner en fuga a los acreedores del director del circo, que se gasta las recaudaciones probando suerte con los dados. Fue un éxito sonado y a la protagonista le acompañan Stephen Boyd, Dean Jagger, Martha Raye y Jimmy Durante.
