Por Gloria Cohen
En un mundo con problemas cada vez más similares debido a la crisis de la pandemia del Covid-19 y los innumerables trastornos que ésta acarrea, cada vez quedan menos temas novedosos que contar sobre Argentina.
Gloria Cohen
Corresponsal del Pollo Urbano en Argentina
Pero siempre puede quizás haber algo nuevo que contar, un par de temas por ahora para no abrumar a los lectores:
Inflación: Si en España se quejan porque la inflación anual llegó al 5,6 %, pueden consolarse pensando que en la Argentina durante el mismo período la inflación fue del 52,1 %, es decir casi 10 veces más.
La inflación es un mal endémico argentino, es decir un problema recurrente, que se retroalimenta con las constantes subas internas del dólar – la divisa norteamericana- que suele utilizarse como reserva de valor para quienes tienen alguna posibilidad de ahorrar.
Pero con “una inflación que sube por el ascensor y con sueldos que suben por la escalera”, cada vez menos pueden ahorrar y suben los índices de pobreza e indigencia para quienes no tienen la posibilidad de acceder a la canasta alimentaria y a los servicios básicos.
Dice el refrán… “mal de muchos, consuelo de tontos”, pero aquí la inflación no sólo es alta, sino que además se agudiza con las sucesivas y cíclicas crisis económicas.
Elecciones PASO: sigla que identifica a elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), fueron creadas en el año 2009 por ley. Son una especie de elecciones Primarias al estilo de los Estados Unidos de América, sólo que allí no son obligatorias y aquí si (para los menores de 70 años).
Las PASO buscan definir los candidatos que competirán en las elecciones para cargos electivos nacionales, es decir para la fórmula de Presidente y su Vicepresidente, además de las listas de candidatos a Diputados y Senadores en cada distrito electoral.
En este año 2021, se trataba de elecciones solo legislativas (para renovar parte de las Cámaras de Diputados y de Senadores); debían realizarse en plena segunda ola de la pandemia, así que por cuestiones sanitarias se postergaron un mes y se realizaron en septiembre.
Si bien las PASO buscan ser un elemento ordenador, en algunos distritos o en algunos casos no existe competencia interna dentro de las alianzas políticas y terminan siendo una gran encuesta nacional.
Si además en las PASO pierde la alianza o partido gobernante, la frágil economía argentina sufre más golpes todavía, con más aumentos inflacionarios y subas del dólar. Esto ya ocurrió en el 2019, cuando el partido del ex Presidente Mauricio Macri perdió en las PASO, lo que auguró su derrota en las presidenciales, y en las legislativas 2021 el partido gobernante también perdió en las PASO.
Luego el resultado puede remontarse un poco en las “elecciones verdaderas o definitivas”, pero el cimbronazo que sufre la economía resulta difícil de remediar.
Frases como “nos hubiera faltado dos semanas más de campaña para ganar las elecciones presidenciales” o “ganamos perdiendo”, son parte de un juego político en el que la mayoría de los 45 millones de habitantes de la Argentina pierden.
PASO a PASO en este mundo pandémico y poco predecible, transcurre la vida en un país acostumbrado durante décadas a la incertidumbre.
