Por Jorge Moreno
La futura ley de los derechos y atención a las personas con discapacidad que se está tramitando en las Cortes de Aragón encara su recta final allá para el 21 de marzo que es el último pleno de esta legislatura.
Mientras familias con hijos con discapacidad intelectual están redoblando esfuerzos para que la nueva norma no contenga ningún artículo que ponga en ¡peligro la continuidad de los centros especiales en los que estudian estas personas.
A los padres les preocupa principalmente la enmienda 166de Podemos que plantea que la segregación del alumnado en diferentes centros y dentro de estos por razones de discapacidad desaparecerá progresivamente en la Comunidad, con un límite temporal de 10años. Así mismo contempla que a partir de la publicación de la ley, ningún alumno se incorporará a este tipo de aulas específicas, salvo que la familia lo solicite expresamente.
Las formaciones políticas están trabajando en un texto transacional sobre estos artículos para que pueda ser aprobado por consenso. En la redacción definitiva se quiere apostar por la educación inclusiva y dejar la puerta abierta la continuidad de estas aulas específicas huyendo de plazos.
Los más complejos capítulos ha sido los relativos a los temas educativos, el capítulo tres. La intención del PSOE es aprobar esta ley en esta legislatura, sobre el 21 de marzo ya que después se disolverán las Cámaras con motivo de la elecciones autonómicas, municipales y europeas del 26 de mayo.
Las familias con hijos con discapacidad intelectual esperan reunirse pronto con las diferentes formaciones politícas para trasladarles sus reivindicaciones, una de ellas el derechoa la elección de la modalidad educativa para sus hijos.
