Le Freak: De Santiagué a Don Santiago.

Por José Luis Lomillos Millán

     Del 7 de octubre de 2019 al 11 de enero de 2020 el Edificio Paraninfo acoge la exposición “Santiago Ramón y Cajal. 150 años en la Universidad de Zaragoza”. Parece  ser que es la primera vez que se utilizan todas las salas para una misma exposición.

   Este extenso evento está comisariado por Alberto Jiménez Schuhmacher, investigador del IISA y el catedrático José María Serrano. En él descubrimos a un Santiago Ramón más cercano y observamos una mayor atención al vínculo de Cajal con la Universidad de Zaragoza así como con su familia. La exposición compuesta por diferentes grandes apartados está dedicada  a los numerosos aspectos que forman la fecunda y heterogénea imagen del nobel.

    Después de ver la exposición y mientras redacto malamente “trá-trá” este artículo intento comprender un poco más al género humano. ¿Cómo es posible que personas del siglo pasado que descubrieron nuevos universos mirando a través de una lente vivan más en el presente a través de sus obras que otras con la tecnología del siglo XXI? Me refiero a la gente que actualmente se empeña en empequeñecer su universo imaginando micro mundos sin sentido. Quizá Arthur C. Clarke o Isaac Asimov tendrían aquí un argumento para alguno de sus relatos… A lo mejor lo grande está en las cosas pequeñas mientras que pequeñas divergencias se convierten en grandes problemas… y es que como en la teoría taoísta del Yin y del Yan dos fuerzas fundamentales opuestas y complementarias a la vez se encuentran en todas las cosas… Bueno, ¡al lío!, que se me va el tarro y me desvío del tema.

 

 

     En su visita al Paraninfo los amantes de la fotografía pueden encontrar  imágenes estereoscópicas, autorretratos y fotos de su esposa e hijos. Mención especial merece el bodegón en color de Ron Negrita y Anís del Mono del año 1912. En este como en otros campos  Ramón y Cajal fue un pionero.

 

 

     Si lo que os interesa es el dibujo y la pintura del natural podéis disfrutar, entre otras cosas, del paisaje de las Ruinas de Santa Fe y de los óleos anatómicos de cabeza, tronco y cuello. Ni qué decir tiene que los dibujos científicos de células cerebrales marcan un punto y aparte en la historia de la humanidad.

 

 

    Las diferentes preparaciones histológicas hacen volar la imaginación de científicos, artistas y público en general poniendo casi a la par, a mi modesto parecer, el valor científico con el artístico.

 

La muestra dedica una estancia en exclusiva a la Escuela Neurológica Española. Los que quieran saber más que investiguen y se den una vueltecica por la sala.

 

    Cruzar el umbral de la biblioteca parece casi mágico. En ella encontrareis diferentes ediciones de cuentos, ensayos, novelas, artículos, memorias y demás obra literaria de Don Santiago. Lo cierto es que resultan realmente interesantes cada uno de los espacios arquitectónicos proyectados por Ricardo Magdalena.

 

    A lo largo y ancho de la visita se pueden admirar diferentes obras de comienzos del siglo pasado realizadas por reconocidos artistas como por ejemplo la Vista de Zaragoza de Juan José Gárate donde aparecen retratados Ramón y Cajal, Moret, Paraíso, Cavia, Pradilla y el propio Gárate. También la caricatura del pintor y dibujante Julio Cortiguera del claustro de la facultad de Medicina de San Carlos, los retratos de Cajal de Joaquín Sorolla y Madrazo o el busto realizado por Mariano Benlliure en 1914.

 

     No me gustaría dejar en el tintero la aventura de la misión Neurolab que en 1998, a bordo del transbordador Columbia, incluyó 12 preparaciones histológicas que el instituto Cajal cedió a la NASA, rindiendo así un homenaje a este gran investigador.

 

    En esta exposición han colaborado la Fundación Ramón Areces, CSIC, Instituto Cajal y la Corporación Aragonesa de Radio–Televisión; el organizador es el Vicerrectorado de Cultura y Proyección Social de Zaragoza. Merece la pena visitarla tanto por el contenido como por el continente, ciencia y arte unidos en un espacio atemporal.

      En fin, como diría el cerdito Porky: “Eso es todo amigos”.  Mientras llega la próxima exposición  seguiré haciendo pilates para trabajar mis fascias e intersticios.

   La página del autor: http://lomillos.wixsite.com/joseluislomillos

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