Por Jorge Moreno
El riesgo de pobreza y exclusión social amenazara a los más pequeños es una triste realidad que afecta a unos tres millones de niños, así lo dice un informe de Unicef, que sitúa la tasa de pobreza infantil española en un alarmante 36%.
Este dato supone un incremento de riesgo de exclusión social entre los más pequeños de un 8% en los últimos cinco años y representa un enorme retroceso en materia de protección de la infancia.
Por parte de España ha habido un descuido en las políticas de infancia, ya que suponen un 1,4% del PIB español, m uy por debajo de los 2,2 de la media europea.
Nuestro país se sitúa actualmente a la cola en materia de pobreza infantil respecto al resto delos países de la Unión Europea.
La evolución a la baja de los ingresos medios de las familias con hijos, la exclusión del mercado laboral de los progenitores y los recortes en transferencias sociales provocan una alimentación desequilibrada, precaria e insuficiente .Muchos niños desayunan poco, en caso de que lo hagan, llevan a cabo su principal comida en el colegio y cenan lo que se puede, según Unicef.
En muchas familias la carne o el pescado son sustituidos por alimentos más baratos como la pasta ante la falta de recursos económicos. Por todo ello resulta una quimera la planificación adecuada del menú semanal en función de la edad de los hijos, su actividad física y mental, sus posibles enfermedades y las necesidades específicas que puedan presentar.
Además, el porcentaje de jóvenes entre 15 y 24 años que ni trabajan ni estudian alcanza en España un 19%, muy lejano del de Alemania por ejemplo con un 7%
Por todo los expuesto Unicef avisa del riesgo social a largo plazo en España
