La reconversión de una segadora (I)

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Por María Sarmiento

   En el ISSIPU llevaban unos años intentando transformar una vieja segadora de peine BCS para que fuera más cómoda a la hora de realizar el trabajo de segar las malas hierbas, muy abundantes en los campos de cultivo de carrascas durante la primavera.   Esta segadora, que llegó de segunda mano desde un pueblo de Lugo, es la vieja segadora de peine y automotriz  BCS   de gas oil con motor Lombardini y una potencia de 7,5CV, que dispone de 2 velocidades hacia adelante y otras tantas hacia atrás. Tiene un peine de siega de 1,15 mts y una toma de fuerza independiente a 990 rpm en baño de aceite y tiene un embrague cónico autoventilado en seco con accionamiento manual y un peso aproximado de 135 kilos.

    Estas máquinas cuyo diseño inicial, allá por 1942, lo realiza el joven ingeniero Luigi Castoldi dieron origen a la primera motosegadora completamente italiana y a la creación de BCS, ya desde entonces, sinónimo de segadoras y a la vez, de prestigio y fiabilidad.

  En esta extraordinaria máquina se han realizado una serie de reparaciones muy importantes que pusieron a prueba la profesionalidad de los técnicos del Instituto. A saber:

-Arreglar la sujección de un eje perpendicular de la biela que lleva movimiento (por deslizamiento) al peine cortante y  fijar correctamente en su alojamiento el eje perpendicular sobre el que balancea la biela que se ajusta con la placa excéntrica que proporciona la fuerza al conjunto.

-Solucionar  los problemas del tubo de escape y proceder a realizarle un alargamiento que haga que los humos salgan al aire por encima de la cabeza del operador de la máquina.
https://www.elpollourbano.es/silvicultura/2012/09/puesta-a-punto-de-la-motosegadora-bcs-del-instituto/

-Protección del disco cinético de arranque para evitar accidentes en el operador de la segadora
https://www.elpollourbano.es/silvicultura/2012/10/extraordinaria-solucion-del-departamento-de-id-para-la-segadora-del-issipu/

     Finalmente, y por indicación de los mecánicos del Instituto, se llevó la máquina a un afamado taller de Tarazona donde se hicieron cargo de rectificarle el pistón, cambiarle las camisas y soldar en frío el bloque del cárter, además de otros ajustes.

    Una vez realizada esta importante reparación se decidió acometer la solución de  dos problemas importantes: de un lado poner en práctica el desarrollo de un sistema móvil y desmontable que permitiera al operador de la máquina realizar sentado su labor de siega y de otra, buscar una solución para facilitar la puesta en marcha de la segadora que, actualmente, hay que ponerla en marcha con cuerda.

   Primero, en el departamento de I+D del ISSIPU se realizaron unos primeros bocetos que sirvieran para construir un cuerpo rígido que sirviera para colocar los previsibles amarres de lo que, a partir de ahora, se llamaría “el triciclo”.

    Primero se realizó una simple maqueta de madera que servía para identificar los lugares donde estaban las roscas de los tornillas que ya tenía la máquina. Finalmente se decidió la estructura final y entonces se sustituyó la maqueta de madera por una estructura de pletina de hierro soldada.

   También se adquirieron dos horquillas de bicicletas de segunda mano con sus correspondientes ruedas (éstas nuevas) y se incrustaron en el cuadradillo trasero que se uniría en “T” al cuadradillo que posteriormente uniría el triciclo a la segadora automotriz.

   También se colocó en su lugar la parte superior de un taburete de bar  reciclado que serviría de asiento para el operario.

(Continuará)

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