Por Luis Gareta
La nueva finca de Costálvaro estregada tras la última operación de concentración parcelaria acaecida en Hinojosa del Campo(Soria) y que ha sido incluida entre las del Instituto, exige renovadas labores de limpieza, poda y restauración.
El invierno pasado se llevaron a cabo múltiples actuaciones de poda severa para definir los “Matorrales de carrasca” en dos, tres o cuatro carrascas que a la vista de su evolución serán reducidas o mantenidas. Estas labores se llevan a cabo fundamentalmente con tijeras telescópicas y pequeñas de mano.
La poda de ramas más consistentes se hace con una veterana motosierra pequeña que es de gran eficacia.
En ambos casos es muy importante dejar todos los restos amontonados para procedes a su quema cuando se crea conveniente y previo aviso a los forestales que, naturalmente, ya están al tanto de todas estas labores. Los troncos también son dejados al aire para su secado y en su día serán trasladados a las leñeras del Instituto
Durante esta campaña hubo una agradable sorpresa: el pequeño peral ha superado el duro invierno y es caso seguro que habrá peras para disfrutar en el monte. Por otro lado, ya es el tercer intento fallido de transplantar alcornoques de Casares (Málaga) aunque los técnicos seguirán insistiendo pues creen de gran interés poder crear una buena colonia de ellos entre las carrascas.
Por otra parte, también se dotó al “casuto” de una silla rígida de plástico dotada de un cajón donde poder guardar pequeñas herramientas para su uso en la finca.
¡Enhorabuena a todos los que hacen posible esta interesante restauración medioambiental!
