Por José Luís Cester
El sistema eléctrico actual requiere que para tener acceso a la energía es necesario estar conectado a la red. El contador eléctrico es la pieza clave para el control del consumo que posteriormente será facturado por la compañía comercializadora. Existe la posibilidad de tener sistemas de generación…
…eléctrica autónomos, ya sea por medios renovables o con combustibles fósiles, que permiten aislarse de la red pero se utilizan en aquellos lugares donde la red eléctrica no llega.
Sobre la base del registro que realizan los contadores del tráfico de la energía, el mercado eléctrico de los consumidores conectados a la red se organiza disociando los conceptos de suministro eléctrico y precio. Por el tendido eléctrico circulan los KW/h y por la cuenta bancaria llegan los cargos.
Cuando se contrata el suministro eléctrico con una comercializadora, los compromisos que se asumen por las partes son la fijación del precio ofrecido por la compañía y la obligación de pago por parte del consumidor. Sin embargo el suministro llega al consumidor con independencia de las condiciones del precio pactado. Es imposible saber de donde llegan los kw/h y sólo se controla la cantidad y la calidad. El pago por el uso de los tendidos eléctricos se hace indirectamente a través de la comercializadora. Ésta cobra a su cliente y luego paga a la distribuidora. Pero la responsabilidad de que el suministro no se interrumpa y llegue con calidad es de la distribuidora (Endesa, Iberdrola y Gas Natural-Fenosa, fundamentalmente). El mismo procedimiento se sigue para los impuestos siendo la comercializadora quien realiza el servicio de recaudación que luego paga a las diferentes agencias tributarias.
Ahora bien, cuando el consumidor no atiende el pago, quien tiene la potestad de dar la orden de corte es la comercializadora y es con esa orden cuando se interrumpe el servicio.
Ha quedado claro pues, que en un contrato de suministro se fija el precio y cantidad, pero es imposible identificar que kilowatios/hora son los que llegan y desde donde, salvo que estés fuera de la red y conectado directamente a la fuente de generación. Este sería el caso de un consumidor en isla y, si la fuente de generación fuese renovable, es evidente que el consumo de energía sería verde 100% con conexión directa.
Pero no es el caso que queremos explicar. Aquí queremos exponer que el consumo de energía 100% de origen renovable, es posible estando conectado a red. A la red se conectan todos los sistemas de generación, renovables y no renovables, pero los kw son todos iguales y tienen la misma capacidad energética.
Las centrales de generación de energía renovable, fotovoltaica, eólica, hidráulica, etc., pueden solicitar al ministerio de industria la asignación de garantías de origen renovable. Y esos certificados identifican perfectamente que esos KW/h vertidos a la red procedan de fuentes renovables. La disociación entre energía eléctrica y precio, se da también en la generación. El compromiso de generación y vertido a red es independiente del precio que pactan los productores de energía. Una vez vertidos los KW a la red estos se mezclan todos sean o no, de origen renovable.
Pero aquí viene la originalidad del sistema. Las garantías otorgadas por el ministerio se pueden transferir y ser vendidas. De esta manera las comercializadoras que quieren diferenciarse por vender energía renovable, pagan un plus a estos generadores y obtienen el certificado que a su vez pueden expedir a los clientes-consumidores que lo soliciten.
Hay quien dice que esto es una tomadura de pelo, porque al punto de consumo no puede asegurarse que llega sólo energía de origen renovable. Pero es exactamente el mismo concepto que explicábamos al principio, uno compra KW/h y cantidad, pero no cuales KW/h son. En definitiva se trata de un equilibrio dinámico por el que entran a la red una determinada cantidad de energía renovable y, por otro lado, sale la cantidad solicitada con el certificado de garantía de origen. El matiz está en que ese equilibrio no se establece en base al kw, sino en base al precio que se paga por él.
Otro argumento que usan los detractores de este sistema es, que si todos los consumidores pidiesen energía de origen renovable, no habría suficiente para satisfacer toda la demanda. Y eso es verdad. El sistema de garantías de origen renovable es una iniciativa que sirve para transitar el camino hacia el cambio energético. La concienciación de los consumidores es gradual y eso permitirá al sistema adaptarse. Es impensable que el 100 % de los consumidores vayan a solicitar de golpe el suministro de origen renovable. Pero el cambio es imparable. Incluso las grandes compañías están adaptando ya su discurso. La dependencia del petróleo debe ir desapareciendo y no sólo por motivos ecológicos.
Algo está cambiando en este sentido, pues el coste de las garantías de origen renovable está subiendo. Se ha duplicado en los dos últimos años. Esto significa que para el consumo de energía renovable debemos estar dispuestos a pagar algo mas. No mucho mas. Muchas Comercializadora regalan esta opción pero otras ya cobran un suplemento por las garantías de origen. Esto no significa que la generación renovable sea mas cara. El sistema las penaliza por los desequilibrios que genera. Pero es indudable que cada vez son mas competitivas y seguirán bajando su coste. Y ese dinero que se paga por las garantías de origen va destinado a investigación y desarrollo de estas tecnologías.
Bastante mas daño hace al consumidor el altísimo precio del mercado que el incremento de coste por el concepto de las garantías de origen. Y eso es debido a que el precio de la energía lo fijan entre cuatro.
Así que si quiere contribuir a la transición energética, este puede ser una modesta aportación. PIDE ENERGÍA CON GARANTÍA DE ORIGEN RENOVABLE.
