Fuendetodos, viaje a la patria de Goya

Por Luis Gareta.

      El pasado  30 de marzo se cumplió  el 275 aniversario del nacimiento de Goya en Fuendetodos, un pequeño municipio del Campo de Belchite que desde entonces tiene a gala ser la patria de uno de los más grandes genios del arte universal y que es un destino obligado para quienes visitan Zaragoza provincia.

   Francisco José de Goya y Lucientes, el penúltimo de los seis hijos de José de Goya y Gracia Lucientes, nació en 1746 en este lugar que por entonces apenas rondaba el medio centenar de vecinos. Su llegada al mundo en Fuendetodos se debió a que el hogar familiar en Zaragoza fue reedificado y sus padres se trasladaron temporalmente a la casa del hermano de su madre.

    Fue el pintor vasco Ignacio Zuloaga, uno de los grandes de la generación del 98, el que ‘inventó’ Fuendetodos. En 1917, dirigió una peregrinación estética a la cuna del artista para encontrarse con el genial pintor aragonés y de paso promocionarse a sí mismo. Consiguió que la prensa le siguiera y puso a Fuendetodos en el mapa con fotografías en los tabloides y revistas principales de la época.

   Desde hace más de 30 años, la Diputación de Zaragoza y el Ayuntamiento de la localidad trabajan de la mano para que este pequeño pueblo siga siendo un lugar de peregrinación sobre Goya y su extraordinario legado. Gracias a todo ese esfuerzo, hasta la llegada del covid recibía más de 20.000 visitantes anuales, una cifra muy significativa para un municipio con poco más de cien habitantes empadronados.

   Todo en Fuendetodos recuerda a Goya: calles y plazas llevan nombres con motivos goyescos y en la iglesia se conserva la pila en la que fue bautizado. Dos bustos honran al genial pintor, pero además la localidad ha hecho una importante apuesta por el arte urbano con murales que sorprenden al turista por todo el casco urbano.

LA CASA NATAL DE GOYA

    Tras muchas décadas de anonimato, la casa natal de Goya fue identificada en 1913 por Ignacio Zuloaga y un grupo de artistas zaragozanos. Lamentablemente el edificio sufrió graves daños durante la Guerra Civil. En 1946 se restauró y en 1982 fue declarado monumento histórico nacional.

    El edificio posee todos los atributos y cualidades propias de una casa de labradores. Consta de planta baja, con zaguán, cuadra y cocina. Unas sólidas escaleras de piedra conducen al piso superior, formado por la sala y dos alcobas, y en una tercera altura está el granero. Resulta interesante para el viajero, como lección histórica viva, poder contemplar un ambiente rural en su auténtica dimensión de austeridad y pobreza.

EL MUSEO DEL GRABADO DE GOYA

   Para Goya el grabado comenzó siendo una simple distracción de convaleciente y un método para aprender de su maestro Velázquez, pero pronto se dio cuenta de las posibilidades creativas que ofrecía. El conjunto de su obra impresa es una parte fundamental de su legado en la que Goya dio rienda suelta a su mundo más personal y subjetivo.

    A unas decenas de metros de la casa natal del genio de Fuendetodos, el visitante encuentra el Museo del Grabado de Goya, que se inauguró en 1989 recuperando una casa típica aragonesa. En este edificio se expone una selección de estampas de las cuatro fabulosas series de grabados que Goya dejó para la posteridad: los ‘Caprichos’, los ‘Desastres de la guerra’, la ‘Tauromaquia’ y los ‘Disparates’.

LA SALA IGNACIO ZULOAGA

     Pared con pared con la casa natal de Goya está la sala de exposiciones Ignacio Zuloaga, que se ubica en las antiguas escuelas de Fuendetodos, construidas bajo el patrocinio del pintor guipuzcoano. Este espacio cultural fue rehabilitado en los años 90 y desde su inauguración en 1996 se ha convertido en un referente internacional del grabado contemporáneo.

     La sala ha acogido más de un centenar de exposiciones centradas en la obra gráfica contemporánea española, desde Miró y Picasso hasta nuestros días pasando por Chillida, Tàpies, Saura, Barceló o, más recientemente, Cristina Iglesias, Feito y Alberto Corazón.

EXPOSICIONES PARA ESTE AÑO

     Fuendetodos es uno de los escenarios principales de la conmemoración del 275 aniversario de Goya. Desde principios de febrero, la sala Zuloaga ha acogido una muestra que ha enfrentado los grabados de Goya y los de Gutiérrez Solana, y a partir del 30 de marzo se inaugurarán otras dos exposiciones: una sobre la obra gráfica de Guillermo Pérez Villalta (que también ha creado su propio ‘Disparate’ sumándose así a la nómina de artistas contemporáneos que han continuado la serie que Goya dejó inacabada) y otra de Fernando Martín Godoy.

     En septiembre, el Museo del Grabado de Goya renovará por completo sus contenidos y además ofrecerá varias estampas del genio nunca antes expuestas. Y en octubre abrirá sus puertas una muestra de grabados de Manolo Millares, el único de los integrantes del mítico grupo El Paseo cuya obra aún no ha pasado por Fuendetodos. El año se cerrará con una presentación de un ejemplar inédito de la serie de los ‘Caprichos’ (1799) que fue coleccionado por el poeta Ramón de Campoamor.

LUGARES DE INTERÉS PRÓXIMOS

    El visitante que quiera seguir la estela de Goya en su tierra natal puede visitar además las pinturas del genial artista aragonés en la iglesia de San Juan Bautista de Remolinos, en la ermita de la Virgen de la Fuente de Muel, en la iglesia de San Juan el Real de Calatayud, en la casa de cultura de Alagón y en el palacio de la duquesa de Villahermosa de Pedrola. La obra de Goya en Aragón la completa la ciudad de Zaragoza con  el Museo de Zaragoza, el Museo Goya, la basílica del Pilar y la cartuja del Aula Dei.

    Además, a apenas 20 kilómetros de Fuendetodos están las ruinas del pueblo viejo de Belchite, bombardeado y arrasado durante una de las batallas más cruentas de la Guerra Civil y conservado tal y como quedó por decisión de Franco. Se trata de un lugar único en España que puede recorrerse mediante visitas guiadas, que da testimonio del horror de la contienda y que todavía conserva la grandeza de su pasado.

   Muy cerca de Fuendetodos también se encuentra la presa romana de Almonacid de la Cuba, la más importante de las que han llegado hasta nuestros días. Se trata de la presa de mayor altura (34 metros) de todas las de época romana conservadas en el mundo. Está situada en el cauce del río Aguasvivas y se construyó en la época de Augusto.

Peportaje patrocinado por la DPZ

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