La gran riada del Ebro

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Fotografías: Rafael Esteban

     Durante el pasado mes de Marzo, el Ebro se desbordó. Nuestro fotógrafo Rafael Esteban estuvo atento para captar con su cámara estas extraordinarias instantáneas, incluído un rescate en los aledaños del Club de Natación Helios de la capital zaragozna ¡Que lo disfrutéis!

    La punta de la riada del Ebro llegará a Zaragoza, en el tramo medio del Ebro, en la madrugada del domingo con un caudal de entre 2.000 y 2.200 metros cúbicos ( m³) por segundo, que mantendrá aproximadamente durante 48 horas.

   Son datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), que ha actualizado sus previsiones de caudal durante este episodio de crecidas que ya ha afectado con caudales extraordinarios a los ríos Arga y Ega, además del Ebro. A las 17.00 horas de hoy, el Ebro en Zaragoza llevaba un caudal de 1.733 metros cúbicos y alcanzaba una altura de 4,71 metros.

    En el tramo medio del Ebro, entre Castejón y Zaragoza, los máximos se alcanzarán en Tudela a primeras horas de la tarde hoy, en Novillas a final del día y en Alagón la tarde del sábado.

   Según la CHE, en los lugares por donde la punta de la crecida ya ha pasado se han producido afecciones similares a los episodios extraordinarios de febrero de 2003 y abril de 2007.

    La riada extraordinaria es fruto de las precipitaciones registradas desde el pasado miércoles, unido a la fusión de la nieve, en el extremo más septentrional de la cuenca, y que ha sido especialmente intensa en los ríos navarros.

    En concreto, las lluvias caídas en el Alto Ebro y en las cuencas altas del Nela, Jerea, Bayas y Zadorra generaron ayer un caudal máximo en el río Nela, en Trespaderne (Burgos), de 500 metros cúbicos por segundo y en el Ebro en Miranda de 700, y hoy un máximo en Logroño de 1.100 metros cúbicos.

   Por su parte, los afluentes de la parte Navarra, como el Arga y el Ega, han producido una riada extraordinaria en Castejón, de 2.400 metros cúbicos por segundo, al confluir en el Ebro.

    Según la CHE, las maniobras realizadas por los embalses del Ebro en Cantabria, de Ullíbarri y Urrúnaga en Álava y Yesa e Itoiz en Navarra, al desembalsar caudales menores a los aportados durante el episodio de crecida, han permitido reducir de forma muy importante los caudales del Ebro en Castejón.

    El organismo de cuenca había realizado con días de antelación desembalses preventivos, maniobras que permitieron reducir al menos 600 metros cúbicos por segundo en el caso de Yesa e Itoiz y de 200 metros cúbicos gracias a los embalses de Ullíbarri, Urrúnaga y del Ebro.

     En cuanto a Mequinenza, en el bajo Ebro, los vertidos extraordinarios que comenzaron el pasado 29 de enero con 800 metros cúbicos por segundo han ido aumentando progresivamente hasta los 1.550 actuales.

    Además, el embalse de Sobrón ha contribuido a reducir los caudales circulantes del Ebro, en Miranda, hasta 50 metros cúbicos por segundo.

Fuente: Efe

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