Por Sofia Sierra Ferrer
Hanói, la capital de Vietnam, es famosa por su arquitectura centenaria y su rica cultura de influencia china, francesa y del sudeste asiático. En el corazón de la ciudad se encuentra su caótico casco viejo, cuyas calles estrechas están distribuidas según los oficios que se practican en ellas. En la ciudad hay muchos templos pequeños, como el de Bach Ma, erigido en honor a un caballo legendario, y también está el mercado de Đồng Xuân, en el que se venden objetos para el hogar y comida callejera. Capital: Ba Đình y el clima: Subtropical húmedo
«Y lo prometido: HANOI
La capital administrativa de Vietnam, la económica es Saigón.
Aquí he pasado un par de semanas, desde donde me he movido a las excursiones a Ninh Binh, Ha Long y Sa Pa.
El resto del tiempo he estado descubriendo la ciudad y he de reconocer que me ha gustado. Mucho más que Saigón.
Hanoi tiene muchos lugares de interés que visitar, museos, espectáculos y un ambientillo cultural que la hace muy agradable de disfrutar.
Hay mucho turismo, por supuesto, como en todas las grandes ciudades.
Hay grandes contrastes, desde los edificios más modernos hasta pequeños rincones donde no entrarías ni con escolta.
Pero el país en sí (bueno, los tres países visitados) es muy seguro. En ningún momento me he sentido en peligro o incómoda con alguna situación inesperada.
Es una cultura completamente distinta a la nuestra. Tienes que observar sin juzgar, porque aquí todo tiene otro sentido, otro ritmo, otra filosofía de vida.
Ha sido una gran experiencia que no olvidaré jamás y que me ha enseñado muchas cosas, incluso de mí misma».
