Entrevista a Rosa Gimeno, escultora y realizadora


Por Cristina Beltrán

            Hacia el 2006 andaba por las calles del casco histórico intentando sacar adelante un espacio para la creatividad, por entonces la conocí, sin amigos que sirvieran para presentarnos o un propicio ambiente artístico, la casualidad del pasear por los mismos sitios a las mismas horas.

    Desde entonces Rosa se ha hecho mucho más fuerte y observa escudriñando el interior, de ella misma y de las demás.

            Su desarrollo como escultora lo realiza en Madrid, donde también reside. Entre otras ciudades su obra se expone en Zúrich, Lyon, París, Lisboa, Madrid, Valencia, Barcelona, Zaragoza. Citando  en su ciudad natal, los espacios de La Lonja, (exposición colectiva) Palacio de Sástago y IAACC  Pablo Serrano (individuales). Regresa a Zaragoza, donde vive actualmente e  inicia su experiencia en el campo de los audiovisuales. Su filmografía  da comienzo tarde, es buena, se implica a conciencia y expande su mundo interior: 2013, “Bailar al son”. 2014, “Paisaje”. 2015, “Un Sueño breve”. 2016, “Mallarmé”  y  “Sin conexión” . 2017,”Una taza de café”, se exponen en galerías de arte o en lugares con aforo sentado y público muy específicamente sensibilizado con el arte y la cultura, puede llegar a todo tipo de personas, pero son las más sensibles quienes van a ver sus actuaciones.

            Quedamos a media tarde, para cuidar nuestra salud, tomamos unas infusiones con nombres evocadores que nos traen al momento de relajo entre las citas y el trabajo al que los días nos tienen sometidas. Deberemos de cuidar nuestra salud y nada mejor que parar un rato para hablar distendidas en una terraza soleada y urbana.

– ¿Qué tal estas?

    Bien, bien, alargando esta sensación de verano, que a finales de Octubre el buen tiempo nos permite, me parece que la luz y el calor son estupendos estimulantes, se reponen fuerzas, la imaginación se activa y aunque me gustaría estirar este periodo, me temo que dentro de poco andaremos enfundados en abrigos y bufandas…

– Antes de dedicarte a los audiovisuales, has sido escultura, ¿puedes explicarme este cambio?

    Pues, por un lado hace años, cuando vivía en Madrid, tenía interés en hacer cine, o algo relacionado con este lenguaje. Escribí algún guion… pero no se llegó a concretar nada.  Por otro lado, ya antes de regresar a mi ciudad, las ideas que quería desarrollar tenían cada vez un carácter más narrativo, y dinámico, y el medio expresivo, o vehículo de la escultura no era muy apropiado, así que tenía que buscar otro lenguaje, más adecuado a mis propósitos. Aunque sigo teniendo alma de escultura, y no descarto seguir trabajando en esta materia.

   Lo que está claro, es que toda mi formación, técnica, y conceptual viene de las Artes Plásticas,  y que mi bagaje estético procede ahí, y esto creo, a la hora de abordar un cortometraje, o un videoarte, me facilita mucho el discurso visual. 

– ¿Qué proyectos tienes?

     Pues, de inmediato terminar de editar un cortometraje, que grabamos la primavera pasada.

   Hay un par de proyectos, que me gustan un montón, en marcha, con otras compañeras artistas, que retomamos en breve, a uno de ellos ya se le  se dio forma a comienzos del verano, y diría que está todo previsto para ponerlo a caminar. En fin, un par de cosas colectivas muy estimulantes.

     También estoy implicada en el desarrollo de una idea interesante sobre la violencia de género en la Asociación Manuel Viola que te comunicaré en su momento y que se te va a encantar.

    Yanaiara es una revista de Arte, en formato digital, que llevamos Gloria García, Julia Dorado, Silvia Castell y yo, lo que también me mantiene ocupada… Así que como ves, proyectos no faltan.

– ¿De dónde bebes para saciar tu sed?

     Las fuentes, que me ayudan, y me alimentan intelectualmente, son diversas, imagino que como para cada artista. Principalmente bebo de la cultura. Creo que en este sentido soy hasta rapiñara y lo aprovecho todo, desde el territorio propio del arte y en general de la cultura, lo emocional, hasta cualquier elemento, por nimio que sea de la vida cotidiana. Me parece que me bebo hasta el agua un pelín viscosa del aburrimiento. Yo diría que me lo bebo todo, todo lo que puedo.

– ¿Qué esperas del mundo hoy?

     Poco bueno, pues la situación social y política es mala, sucia, muy sucia. Pienso en las generaciones de mis abuelos y de mis padres… todo lo que trabajaron para mejorar las vidas de todos. Me produce mucha vergüenza y dolor. Estoy convencida de que estamos asistiendo a un cambio de “Modelo”social, y no veo la forma de frenar y revertir, esta situación.

– Dime un color bonito para ti, una frase favorita y algo que te haga gracia.

     Color… cualquier color, hoy me viene bien el rojo inglés. Frases a montón, pues te cito alguna de nuestros clásicos españoles, como, “La poesía tal vez se realza cantando cosas humildes” de Cervantes, o  el adagio que  Góngora utilizaba como estrofa: “ande yo caliente y ríase la gente”

   Y una cosa que siempre me ha hecho mucha gracia, es ver a un perro como gira sobre sí mismo a toda velocidad intentando atraparse la cola, esto lo digo con todo mi respeto a los canes. 

      Nos despedimos para volver a encontrarnos, dejemos que las tardes transcurran sin escuchar demasiado a los medios de comunicación, el tiempo es gratis y podemos utilizarlo en menesteres solidarios y valiosos que hay por todo el mundo mundial.