Podemos: fábrica de paracaidistas

Por Al Caponi

  Podemos, la formación que iba a acabar con la «casta»  reproduce, curiosamente en Zarabola, una de las prácticas más criticadas y  controvertidas de la vieja política: la inclusión en sus listas de «paracaidistas»  o «cuneros» impuestos por la dirección nacional.

–Eché, cómo es posible que todo un Faraón haya permitido que le hayan colocado los estalinistas madrileños unos candidatos a dedo en su feudo, paradigma de la democracia, la libertad, la participación….

-¡Para,  para, leche!, que me mareo… Mira Caponi, tú sabes que, a veces, en las organizaciones humanas ha de imponerse el pragmatismo. Ahora mismo estamos en una fase de consolidación del poder omnímodo y personalista de Pablitosky  para que no se nos vaya el partido de las manos ante tanto aficionado como nos rodea ¿Tú has visto lo que pasa en el ayuntamiento zaraboliano? ¡No tenemos ningún protagonismo porque los nuevos rojetes  de IU se nos han comido el bocadillo! Por eso, ahora nos hacen falta personas que no quieran que el podemismo  se imponga en Europa y en todo el mundo sino, de momento, en España…

-¿Hay que eliminar pues  a los new troskyliness, Cesar de la Monegrada?

-Por supuesto. Esa será una de las misiones del general Tito Rodrigueees, la creación de una estrcturas dentro del partido que nos lleven  a un  centralismo burocrático democrático y sumiso a la autoridad comarcal, provincial, autonómica y estatal. ¿Y quién mejor sabe hacer eso que los militares? Y Aragol, te lo juro por Arturo, va a ser la comunidad piloto. Te estoy dando una primicia, Caponi…¿Lo vas entendiendo ahora?

-¡Joer, ahora sí que lo entiendo todo, leche!…Por cierto,  y las bases, Káiser del Ebro, ¿han visto bien este “dedazo” totalitario?

-Naturalmente, Caponi. Los jefes de nuestros círculos ovoides  están preparándose para ser una élite burocrática que sin piedad formen la nueva nomenklatura que convierta a Pablitosky en el Gran Benefactor y Padre de España y a mí, por consiguiente, en el Conductor de la Gusanera Monegra, Pirinegra y Minegra….

-Y en el caso de Periquito el Arrojao, ¿a qué se ha debido su cooptación?

-Bueno, esto ha sido una operación de alto nivel a la que no nos podíamos oponer. Arrojao, a través de Doña Avina, una multinacional del amor, la paz y la verdura, convenció a Pablosky que un partido no puede funcionar sin un Comisariado del Pueblo Podemita para Asuntos Interiores (CPPAI), un Beria  de Podemos para  entendernos. Y llegados a este punto, ¿Quién mejor para este puesto que un hombre que elevó la cultura del agua hasta un enorme botijo de barro? No conviene en el partido gente que beba vino. Nosotros tenemos que beber agua, mucha agua.

-Pero Su Opulencia, ¿dónde quedan entonces los postulados democráticos de selección interna de los que tanto ha alardeado Su Magnificiencia? ¿Ya no tienen ganas de celebrar los plenos en el foso de la Aljafería? ¿Hace mucho frio?

-Pues de todo un poco…La democracia entre aficionados es muy lenta y nosotros, los jefes, tenemos prisa…Ya estamos arriba los que tenemos que estar ¿para qué tanta pérdida de tiempo? No podemos estar día y noche votando…¡Ejem, ejem!… El pueblo nos pide eficacia, el pueblo confía en nosotros ¡pues vamos a ello sin más dilación!

-¿Y la democracia, Faro del Universo?

-¿Y tú me lo preguntas? ¡La democracia soy yo!

-¡Jodo, petaca con el Faraón!