El Centro de Arte y Exposiciones de Ejea de la DPZ reabre sus puertas con una muestra antológica de la atormentada obra de Víctor Mira


Por Lolita Piedrahita

    El Centro de Arte y Exposiciones de Ejea (CAEE) de la Diputación de Zaragoza reabre hoy sus puertas tras el paréntesis provocado por la pandemia de covid, y lo hace con una exposición antológica y atormentada de Víctor Mira.

   La muestra permite disfrutar de la ‘Colección Juglanss’, una de las más destacadas sobre la polifacética y subyugadora obra de este reconocido pintor, grabador y escultor zaragozano que reúne 43 creaciones de diferentes formatos caracterizadas por el dolor y su angustia existencial.

     La muestra ha sido presentada esta mañana en la Diputación de Zaragoza y ha sido cedida por el coleccionista ejeano Ángel Navarro Pardiñas. Podrá verse desde hoy hasta finales de año en horario de viernes a domingo de 11.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00.

    “Hoy es un día muy especial porque reabrimos el CAEE de Ejea de los Caballeros, un imponente espacio enclavado en el casco histórico de la localidad que acoge la dominante y poderosa obra de Víctor Mira, una de las figuras clave del arte contemporáneo aragonés que llevó su obra por medio mundo”, ha destacado la alcaldesa de Ejea y vicepresidenta de la Diputación de Zaragoza, Teresa Ladrero, en la presentación de la muestra.

      “Se trata de la novena exposición que organizamos desde que abrimos el centro en el año 2016 y podemos decir que con esta nos sentimos especialmente vinculados. Sentimos una pasión especial por Víctor Mira y la razón de ser de su arte, donde el sufrimiento, la angustia y el dolor toman siempre el papel protagonista”, ha explicado Ladrero, quien además ha subrayado que esta colección reúne “mucha categoría y dimensión”.

   Por su parte, el coordinador de Proyectos y Difusión Cultural de la DPZ, Ricardo Centellas, y para transmitir “ese malditismo que Mira cultivó como artista”, ha relatado una frase del propio autor: “Me identifico con la vida y el arte a través del dolor, la felicidad es estéril”, ha leído Centellas en palabras de Mira.

    “Su obra está dominada por la angustia, que se refleja en su tormento existencial que acabó con su suicidio en el año 2003”, ha explicado Centellas, quien a su vez  ha recalcado que ‘Colección Juglanss’ refleja “muy bien” el universo de Víctor Mira y todos los tópicos de su pintura. “Su obra es un expresionismo plástico muy subyugador y con muchísima masa pictórica, que la hace única en el arte de los 80 en España. Esta es una exposición antológica pero también un homenaje al autor, que fue un artista prolífico, con miles y miles de obras a sus espaldas, capaz de pintar un cuadro al día, incansable dibujante y grabador de series larguísimas”.

   ‘Colección Juglanss’ es una antología de la personalísima obra que Víctor Mira fue creando a lo largo de su vertiginosa trayectoria y que le sirvió para recibir importantes reconocimientos, como el de mejor artista en la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Madrid en 2003. La colección reúne 43 obras de diferentes tamaños y soportes, que destacan por su estilo colorista, de modo que el visitante puede disfrutar de algunas de las mejores creaciones de Mira. Pinturas, dibujos y grabados completan la exposición en la que destaca la obra ‘Montjuich en junio’, un tríptico de 1983.

  Próximamente se van a organizar visitas guiadas por la exposición, que podrán reservarse de forma gratuita llamando al teléfono 976 66 11 67.

Víctor Mira

    Víctor Mira es un artista inclasificable y difícil de definir que nació en Zaragoza en 1949 y se suicidó en 2003 arrojándose a las vías del tren en la ciudad alemana donde residía. Su carrera artística estuvo marcada por un carácter autodidacta, desarrollando el grueso de su trabajo entre la pintura, el dibujo y la escultura. Su gusto por el arte propició que desde muy joven encauzara su trayectoria profesional, ya que con tan solo 18 años Mira pudo realizar su primera exposición de escultura en Zaragoza, coincidiendo, además, con que esta muestra era la primera que se celebraba al aire libre. Durante la década de los 70, viajó por la península a diferentes lugares como Madrid, Barcelona o Pamplona para luego pasar a conocer países como Alemania o Estados Unidos invitado por el Meadows Museum de Dallas.

   Su pasión por el arte vino de la mano del gusto por la literatura. En 1975 publicó ‘El libro de las dos hojas’ y en 1978 ‘Estética kebrada aragonesa’. Además de las publicaciones comienza a trabajar en su libro ‘Tierra’ en 1979, y a principios de los 80 prepara su libro de grabados ‘Cien imágenes de África’, que se publió en 1996 concretamente. Publicó también poemas, recogidos en ‘Madre Zaragoza’ y tres de libros de grabados, ‘Imágenes para enamorados’, ‘Bachkantaten’ y ‘Estilitas’.

   La trayectoria de Mira fue frenética. Expuso en diferentes puntos de la geografía peninsular, europea e incluso americana, sacó adelanto multitud de publicaciones y logró diversificar sus trabajos, creando pósteres, carteles, poemas, pintura, escultura y obra gráfica. Destaca entre todo ello la invitación del artista Antonio Saura a Mira para participar en la exposición conmemorativa del 250 aniversario del nacimiento de Goya, en Zaragoza, en 1996.

   Cosechó grandes éxitos,  que le llevaron a ser galardonado en el 2003 como mejor artista español vivo en la Feria ARCO. Su indiscutible aportación al mundo del arte y la cultura fue también reconocida cuando el artista, que vivía entre Barcelona y la localidad bávara de Breitbrunn, murió trágicamente al arrojarse al tren tras haberse registrado un incendio en la cocina de su apartamento. Las pérdidas materiales fueron cuantiosas y la noticia de su fallecimiento conmocionó al mundo del arte y en especial a su tierra natal.

Centro de Arte y Exposiciones de Ejea

El Centro de Arte y Exposiciones de Ejea es propiedad de la Diputación de Zaragoza y se configura como uno de los principales escaparates del arte actual en la provincia de Zaragoza y Aragón. Se inauguró en 2016 con una clara vocación de fomento y dinamización de la cultura contemporánea en el medio rural zaragozano. Para ello, cuenta con unas punteras instalaciones de más de 2.000 metros cuadrados de superficie repartidas en varias plantas articuladas en torno a un gran patio central acristalado de arquitectura diáfana y contemporánea.

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