Competitividad y responsabilidad, los ejes que marcan la descarbonización en las empresas


Por Adelina Garsón

   Rut Calvo, responsable del equipo de Sostenibilidad de Circe; Héctor Benito, director de Consultoría, Proyectos y Sostenibilidad de Carreras; y Ana Cristina Fraile, directora de Sostenibilidad de Forestalia, debatieron dias pasados en HERALDO…
sobre la situación en la que se encuentran las empresas aragonesas en materia de descarbonización.

    Es uno de los grandes objetivos de instituciones, empresas y particulares en materia medioambiental. Prueba de ello es el objetivo de un 55% menos de emisiones netas de gases de efecto invernadero (una vez deducidas las absorciones) en comparación con el año 1990 que la Unión Europea ha marcado para lograr en el año 2030. Y, aunque en España ha habido importantes avances en los últimos años a este respecto, queda camino por recorrer para cumplir con la descarbonización, un proceso clave en la lucha contra el cambio climático causado por el uso de combustibles fósiles.

    Precisamente sobre la importancia que tiene esta para las empresas aragonesas y sobre los retos que entraña debatieron el pasado martes en el Espacio H de HERALDO Rut Calvo, responsable del equipo de Sostenibilidad de Circe; Ana Cristina Fraile, directora de Sostenibilidad de Forestalia; y Héctor Benito, director de Consultoría, Proyectos y Sostenibilidad de Grupo Carreras.

    En una cita moderada por la periodista Nerea Tirado, los expertos comenzaron abordando el Real Decreto aprobado el pasado mes de marzo por el que se creó el registro de huella de carbono, compensación y proyectos de absorción de dióxido de carbono. «En Carreras ya hacíamos el registro de huella de carbono voluntario para nosotros y para nuestros clientes. Pero, como operador logístico, al ser una empresa de servicios pasamos a formar parte de la industria, con lo que vamos a tener que hacer una declaración obligatoria y pagar por las emisiones que ejecutamos como si fuésemos un elemento industrial más. Eso nos va conllevar más costes y hará que tengamos que revisar nuestros procesos y evaluar cómo podemos lograr mitigar nuestras emisiones», apuntó Benito.

Los expertos señalaron que la descarbonización se va a convertir en un elemento competitivo

    Fraile, por su parte, indicó que en Forestalia el cambio será similar y que ellos ya trabajaban con el cálculo de la huella y el impacto del cambio climático antes de la normativa. «Lo que cambia ahora es la obligatoriedad de hacer el cálculo y también la de presentar un plan de reducción a cinco años y la de poner a disposición del público tanto tu huella como tu plan de reducción. También entran en juego procedimientos certificados y empresas acreditadas para hacer los cálculos, que obligarán a revisar todos los procesos para reportar correctamente los datos». En el caso de Circe, Calvo señaló que la norma no les obliga a medir la huella debido a su tamaño, pero que sí que les afecta como centro tecnológico. «Trabajamos mucho en la descarbonización, y ahora con la nueva norma y el mayor alcance de esta tenemos que hacerlo con la idea de que las empresas puedan llevar a cabo las compensaciones con una magnitud más amplia», expuso.

Requerimientos

     Los intervinientes coincidieron en señalar la importancia de que todas las compañías tengan en cuenta la descarbonización, pues aunque las administraciones públicas solo obliguen a realizar el cálculo de su huella a las empresas de más de 500 trabajadores, es habitual que estas extiendan ese requerimiento a sus proveedores o colaboradores, que en muchos casos son pymes. Pero, para que estas puedan hacerlo, destacaron la necesidad de que las instituciones les ayuden y que los objetivos que se les marquen sean asumibles teniendo en cuenta su tamaño y su presupuesto. Asimismo, lamentaron que no exista un registro en todas las comunidades autónomas, como ocurre en Aragón, pues una uniformidad en este sentido facilitaría su labor, y pidieron a las administraciones más facilidad en el acceso a la documentación, y más transparencia, agilidad y comodidad.

    Tras remarcar que la huella se va a convertir en un elemento competitivo, el debate entró en el tema de las renovables. Aquí, Fraile recordó el buen momento que vive Aragón: «Estamos viviendo un momento que puede suponer una buena oportunidad también para las administraciones locales, porque estamos generando mucha renovable, que se ha desarrollado en la Comunidad con un ‘know how’ y una innovación que es muy aprovechable», afirmó, recordando la importancia que estas energías tienen para cumplir con los objetivos que marca la Unión Europea en materias como la neutralidad climática.

   Desde Carreras, Benito manifestó que, como centro logístico que son, tienen un consumo energético relevante: «Por eso empezamos a medir nuestra huella en 2011 y, desde entonces, la hemos reducido un 35%. Todos nuestros clientes principales nos obligan a demostrarles nuestras emisiones reales y los agentes del sector ven que es un elemento diferenciador el hecho de que sus productos tengan una huella cero y que sean sostenibles. Hay una concienciación muy alta en nuestra actividad». Asimismo, Calvo aseguró que, al ser un centro tecnológico y de medio ambiente, están «obligados a estar concienciados», y subrayó que las empresas lo están cada vez más, «pero que es difícil encontrar la tecnología a aplicar y saber hacer bien ese balance entre el compromiso ambiental y la sostenibilidad desde sus tres patas».

En la cita se reivindicó la importancia de las sinergias para hacer crecer a este ámbito en Aragón

    A continuación, los profesionales reivindicaron la importancia que están teniendo las sinergias y las alianzas para hacer crecer este ámbito en Aragón y hablaron de los avances que han llevado a cabo en sus respectivas organizaciones, como los proyectos de compensación, la incorporación de vehículos eléctricos a su flota, la instalación de puntos de recarga eléctricos que ha impulsado Forestalia, iniciativas sobre hidrógeno y otras dirigadas a los empleados, como las de concienciación a los conductores de Carreras o el plan de movilidad de Circe, en el que llevan dos años trabajando y por el cual la mayoría de sus trabajadores se desplazan en bicicleta hasta sus instalaciones.

Un futuro sin carbono

    Tener claro lo que se exige a las organizaciones y los acuerdos que llegan desde Europa para que los requisitos vayan en esa línea fue otro de los puntos que destacó Calvo, que recordó que se está trabajando mucho la digitalización, presente en la nueva plataforma que han diseñado en Circe para el cálculo de la huella. «Yo diría a las empresas que piensen que es algo obligatorio, porque los mercados lo están exigiendo y el consumidor, que a menudo está más informado que estas y tiene un compromiso ambiental mayor, también. Así que cuanto antes la introduzcas, mejor», añadió.

«O te subes al barco o en dos o tres años tu empresa desparecerá o tendrá un valor más bajo»

     El experto de Carreras puso encima de la mesa que, como empresa, «todo lo que reduzcas te beneficia económicamente», y que próximamente existirá la compra de emisiones, «por lo que saber dominar este tema será muy importante». «Estés o no de acuerdo con el cambio climático, van a llegar más certificaciones de sostenibilidad, así que o subes al barco o en dos o tres años tu empresa desaparecerá o bien tendrá un valor más bajo, porque no ofrecerá lo que el mercado pide», agregó.

    Ana Cristina Fraile, por su parte, recalcó que la descarbonización, que ya se la exigen los financiadores a Forestalia para sus inversiones, es una cuestión de responsabilidad para las empresas, por la contribución que con ella pueden hacer a frenar el cambio climático. «Además de que sirve para corregir ineficiencias, generar ahorros y ser más competitivos», concluyó.

Publicado en: ARAGÓN MEDIA LAB https://www.heraldo.es/branded